- Las primeras inversiones del sector del hidrogeno verse en México suman 1,500 millones de dólares
- México podría presentar hasta un ahorro de 64% en costos de producción de hidrógeno verde
Un estudio Hydrogen for Net-Zero de McKinsey & Company y el Hydrogen Council, detalla que la industria desarrolladora del hidrógeno verde se caracteriza por ser baja en emisiones de carbono, como complemento de otras tecnologías de descarbonización, ofrece una opción a largo plazo, escalable y rentable para una profunda mitigación de emisiones contaminantes en sectores como el del acero, el transporte, el marítimo y el de la aviación, entre otros.
Al respecto, Israel Hurtado, presidente de la Asociación Mexicana de Hidrógeno (AMH2), detalló a este reportero que la industria del hidrogeno verde atraviesa un entorno complejo por la pandemia, sin embargo, la región del Baja California, Durango y el bajío (Querétaro, San Luís Potosí, Guanajuato y Aguascalientes), tienen un gran potencial para detonar hubs industriales, pues su amplía presencia de naves industrias y crecimiento en su visión empresarial de estas regiones len confiere ser un sitio ideal para detonar la presencia de este nuevo energético.
Mencionó que la presencia en entidades como Querétaro y Guanajuato que cuentan con presencia de grandes industriales automotrices, aeronáuticas y otros rubros que les permiten que el hidrogeno verde tenga gran posibilidad de ser el energético para estos parques industriales, pues al ser desarrollado se puede conectar a los gasoductos existentes o por instalar para subsanar la necesidad de energía de las trasnacionales.
El principal reto de la industria del hidrógeno verde es tener una hoja de ruta adecuada y actualizada para detonar a los proyectos corporativos, así como socializar el tema que es desconocida por muchos sectores sociales y que necesitan conocer las bondades de este energético.
Por ello, la región del bajío de México que goza de una ubicación geográfica favorable y un gran potencial renovable, tanto solar como eólico para obtener hidrógeno verde puede posicionarse como un líder en instalación y futura exportación hacia Europa, Asia y Estados Unidos.
“Tenemos en proyección que las primeras centrales de hidrógeno verde comiencen a ser instauradas en 2022 y los años subsecuentes. Debemos citar que el Consejo Mundial de Energía indica que este energético comenzará a bajar de precios en estos próximos años, ser más barato y competitivo que los combustibles fósiles”, dijo.
Entre los proyectos para producción de hidrógeno verde que se encuentran en construcción en algunas regiones del país destaca Coahuila, Guanajuato, Durango y Sonora con una inversión aproximada de 1,500 millones de dólares.
En el caso de Durango se desarrollan los primeros trabajos de amoniaco verde, como solución al uso de energéticos fósiles. “Otro rubro de impulso a la energía renovable es Sonora, Coahuila y Nuevo León que comienzan a despuntar en uso del sector solar y eólico”. Recalcó que el principal objetivo del sector del hidrogeno verde es permitir que los parques industriales del bajío descarbonicen su avance industrial.
La AMH2 aprecia que en los años venideros la región bajío (Querétaro, Guanajuato, San Luis Potosí y Aguascalientes), la península de Baja California, el corredor de Coahuila, Durango y Nuevo León, tienen gran posibilidad de descarbonizar sus industrias con desarrollo de este tipo de energético.
Una de las metas más importantes que puede lograr la industria del hidrógeno verde a nivel global en 2030, es la educación y la promoción de las ventajas de su uso mediante proyectos demostrativos para que la gente adopte a este energético.
Dichas iniciativas de la AMH2 se complementan con su impulso a contar con un marco de políticas de referencia para una regulación eficiente del hidrógeno verde. Cabe mencionar que la AMH2 tiene entre sus miembros a empresas como Iberdrola, Enel, Grupo México Infraestructura, Infra, Engie, Enagas, Siemens Energy o Mitsubishi Power, entre otras.
Aceptó que las políticas energéticas de la Presidencia de México generan incertidumbre en las inversiones sustentables, pues se cambian las reglas de juego de las corporaciones; debemos tener en mente que una buena parte de los 85 parques eólicos y solares del país tiene capacidad de incrementar su apuesta por generar energéticos como el hidrógeno verde, pero se deberá esperar que sucede con la iniciativa de ley a discutir en 2022”.
Sin embargo, de forma no oficial la Comisión Federal de Electricidad (CFE) podría producir hidrógeno verde entre el 2023 al 2024. El plan piloto de una planta federal para este energético se estima que ayudaría a disminuir las importaciones de gas natural que México realiza desde los Estados Unidos.
La Asociación Mexicana de Hidrógeno proyecta que hacia 2050, en México se podrá tener una industria consolidada de hidrógeno verde, vehículos de transporte público y privado circulando con hidrógeno, la descarbonización de las industrias, blending, y generación de electricidad con este elemento.
Para el presidente de la AMH2, México puede tener hasta 64% menos de costos de producción de hidrógeno verde comparado con otros países y tiene ventajas para la exportación por su ubicación geográfica y sus tratados de libre comercio.
“Es urgente que México apueste al hidrógeno verde, pues naciones como Chile, Colombia y Uruguay están comenzando exportaciones de energéticos verdes a Estados Unidos y la Unión Europea, y nuestro país no puede desperdiciar esta oportunidad”, dijo.
El hidrógeno verde está tomando fuerza como una opción para descarbonizar la matriz energética de América Latina. Chile es uno de los líderes, pero también hay otros países con gran potencial, como México, Argentina, Brasil, Perú, Bolivia y Costa Rica.
Diversos especialistas coinciden que la industria impulsora del hidrógeno verde desempeñará un papel fundamental para ayudar al mundo a alcanzar el compromiso de cero emisiones netas para el 2050 y limitar el calentamiento global a 1,5º tomando en consideración los usos del hidrógeno en la industria, la energía, la movilidad y los edificios.
SE MANTIENE EL CRECIMIENTO INDUSTRIAS DEL BAJÍO
La región Bajío –especialmente en Querétaro y Guanajuato- mantiene un alto dinamismo, robustecido por su ubicación geográfica, infraestructura y mano de obra calificada, lo que ha permitido que sectores como el automotriz, aeroespacial, de almacenaje, transporte, alimentos y bebidas, entre muchos otros.
En el caso del estado de Querétaro, el reporte de mercado del cuarto trimestre del 2021 correspondiente, elaborado por Fernando Lara, analista de la división de investigación de mercados de Newmark, destacó a este reportero que el inventario industrial clase A se integra por 6.3 millones de metros cuadrados al cuarto trimestre de 2021, siendo un sector esencial para el consumo de energéticos renovables.
En el caso del estado de Guanajuato, Fernando Lara señala que el cierre del mercado industrial durante el 2021 mostró condiciones de estabilidad y tendencia de crecimiento en el 2022, cerrando con un inventario industrial Clase A de 8.1 millones de metros cuadrados al cuarto trimestre de 2021 y un aumento de la superficie industrial en construcción que pasó de 44 a 90 mil metros cuadrados y se espera que hacia el 2022 el inventario industrial se incremente por proyectos de construcción no desarrollados durante el 2021.
Son cuatro los factores del mercado que destacaron en el último trimestre del 2021: compra de portafolio industrial, inversión en proyecto de infraestructura, amplia diversidad de proyectos para nuevas naves industriales e incorporación de nuevas naves industriales.
Para la marca Newmark el crecimiento industrial del bajío en sus nuevas naves industriales permitirá que crezca el consumo de nuevos energéticos como es el hidrógeno verde, paneles solares, etc., pues las empresas que se preve lleguen gracias al nuevo Tratado de Libre Comercio detonará una mayor exigencia a los constructores nacionales para establecer infraestructura más sustentable.
MÉXICO EN LA PUERTA DE SER POTENCIA DE HIDRÓGENO VERDE
México no solo tiene el potencial para ser uno de los productores más importantes de hidrógeno verde en el mundo, también se proyecta como uno de los fabricantes de tecnologías para la producción y uso de este combustible, así como un exportador, consideró la Agencia Alemana de Cooperación Internacional (GIZ).
México en caso de detonar el mercado de hidrógeno verde hacia 2050, podría generar 90,000 empleos directos.
Los estados que se tienen detectados con mayor potencial de producción de hidrógeno verde son: Chihuahua, Coahuila, Sonora, Durango, Nuevo León, Zacatecas, Tamaulipas, Campeche, Guanajuato, Querétaro, San Luis Potosí y Veracruz, informó la GIZ.
QUÉ ES EL HIDRÓGENO VERDE
El hidrógeno verde es un combustible producido mediante la electrólisis del agua, la cual se logra a través de electricidad proveniente de fuentes renovables como la solar y la eólica. Una de sus ventajas es que no genera gases de efecto invernadero durante la combustión ni en el proceso de producción.
El hidrógeno verde tiene diferentes usos que podría aprovechar América Latina. Por ejemplo, sirve como combustible para los procesos de refinación, químicos y metalúrgicos. También es utilizado en los motores de vehículos pesados: ferrocarriles, barcos y aviones. Además, tiene las ventajas de que al comprimirlo se puede almacenar en grandes cantidades durante mucho tiempo y de que su ligereza hace más fácil su manejo.
El hidrógeno verde puede ser aprovechado como combustible, principalmente en el transporte de carga y de pasajeros. Dicho sector demandaría 1.7 millones de toneladas al año hacia 2050, para lo cual sería indispensable la instalación de 450 estaciones para su despacho. La inversión anual llegaría a 6,000 millones de dólares (mdd), de los cuales 2,000 mdd serían para transporte público y 4,000 mdd para el de carga, indica la H2 Hidrógeno.
A nivel mundial, alrededor de 4,5 millones de muertes anuales se deben al uso de combustibles fósiles como carbón, petróleo y gas, lo que genera pérdidas económicas estimadas en 2,9 billones de dólares, equivalente a aproximadamente un 3,3 por ciento del Producto Interno Bruto mundial.