El fraude omnicanal, los ataques vía móviles, el robo de identidad y el fraude amistoso podrían repuntar en 2023 ante un panorama en el que el comercio en línea en el país sigue creciendo pero también recupera un balance con las compras en tiendas físicas, afirma Xavier Aguirre, director comercial para Signifyd en México.
Al incrementarse los canales de compra, los métodos de pago y las formas de entrega de productos, los retailers deberán analizar y prestar atención a un mayor número de variables que podrían fungir como entrada para los defraudadores, quienes buscan toda y cualquier vulnerabilidad para cometer algunos de los tipos de ataque mencionados a continuación.
Una vez que los defraudadores hayan obtenido los datos para acceder a la cuenta de un usuario legítimo o hayan tomado control de la tarjeta de crédito de un tercero, por ejemplo, tendrán a su disposición distintos formatos para cometer fraudes.
Desde comprar en línea un producto y recolectar en tienda antes de que el cliente legítimo note el cargo, hasta comprar a través de un quiosco dentro del comercio para dificultar ser rastreado por los equipos antifraude. Recordemos que los criminales son rápidos al innovar las técnicas y herramientas para lograr su cometido. Sin innovar al mismo ritmo, los más afectados serán los comercios, quienes deberán hacerse cargo de los contracargos.
Durante la jornada de altas ventas llamado “Buen Fin 2022”, cuyas operaciones en canales digitales representaron el 18% de las ventas totales y generaron $23.7 mil millones de pesos, se registró un crecimiento del 61% en los compradores que usaron el smartphone para visitar y explorar los sitios de los retailers durante los días de ofertas, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Ventas Online (AMVO).
Este comportamiento ejemplifica lo que los retailers pueden esperar de sus consumidores y los defraudadores este año: entendiendo que los smartphones seguirán siendo una herramienta popular para los clientes del e-commerce, los defraudadores buscarán vulnerabilidades en las principales aplicaciones de comercio en línea para robar información sensible, como nombres de usuario y contraseña; o incluso podrían crear aplicaciones falsas con el fin de robar credenciales de compra y realizar transacciones a su nombre.
Por medio de ingeniería social, el desarrollo de sitios de comercio falsos y otras tácticas engañosas de phishing, los defraudadores consiguen la información de los clientes para acceder a sus cuentas y realizar compras a su nombre. Mientras la creación de cuentas sintéticas sigue asombrando al comercio electrónico, el fraude de apropiación de cuentas sigue en pleno crecimiento.
Datos de Signifyd muestran que la presión de fraude proveniente de la apropiación de cuentas de compradores maduros, es decir que tienen un historial de compras con el comercio, aumentó 7% el año pasado en comparación con 2021, con un 34% de la presión proveniente de esas cuentas versus 66% proveniente de cuentas de clientes nuevos; ¿Estarán los comercios listos para lo que pueda suceder en 2023?.
No todos los defraudadores son criminales expertos. Algunos clientes, dueños legítimos de las tarjetas de crédito y débito, llegan a impactar al retailer al levantar, intencionalmente o no, reclamaciones falsas que obligan a la tienda a regresar el monto pagado, indicando que el producto no llegó al domicilio indicado, que jamás se recolectó en tienda o que el cargo es no reconocido.
De acuerdo con Visa, el fraude amistoso aumentó entre 20% y 30% a nivel global en 2022, dependiendo del país. Y con el constante crecimiento del e-commerce en el mercado, México definitivamente no está exento.
“Una forma en la que los comercios pueden evitar ser víctimas de fraude en 2023 es implementando soluciones antifraude con tecnologías de Machine Learning, como la de Signifyd, que analiza miles de variables durante una transacción para detectar si el comprador ha cometido algún tipo de fraude anteriormente, si se trata de un método de pago robado o si algún dato resulta sospechoso y riesgoso”, asegura Xavier Aguirre.
En caso de que la transacción sea fraudulenta, la solución de Signifyd la rechaza automáticamente, con la precisión necesaria para resguardar la experiencia de los clientes legítimos y permitir que realicen sus compras sin obstáculos o interrupciones. Además, al contar con una plataforma antifraude avanzada, los comercios tienen una estrategia proactiva con información actualizada sobre la evolución del fraude, en lugar de una estrategia simplemente reactiva a las tendencias del momento.