La organización ambientalista Igualdad Animal y el diputado Salvador Caro -integrante del Grupo Parlamentario del Movimiento Ciudadano-, presentó una iniciativa con proyecto de decreto por el que se reforma elartículo cuarto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia de reconocimiento de la sintiencia y protección al bienestar animal.
Con el cual se dispone que todo animal no humano con sistema nervioso complejo se reconoce como ser sintiente y que el Estado promoverá, protegerá, respetará y garantizará su bienestar.
Dicha iniciativa fue elaborada tomando en cuenta las investigaciones realizadas a lo largo de 15 años por la organización Igualdad Animal, sus efectos serán un principio rector para la homogeneización del reconocimiento como seres sintientes, el desarrollo de la doctrina del Derecho y la Jurisprudencia, así como la transformación jurídica, política y social.
La propuesta tiene como referente el bienestar, el cual supone tener certidumbre sobre la experiencia subjetiva de los seres sintientes procurando el desarrollo de sus capacidades.
“Los animales están aquí con nosotros y tenemos la responsabilidad de generar las condiciones para respetar su vida y su bienestar. Debemos ampliar el marco de indignación sobre el maltrato animal”, Dulce Ramírez, vicepresidenta para Latinoamérica de Igualdad Animal.
La ciencia lo dice: los animales sienten y son conscientes. En julio del 2012, un destacado grupo internacional de neurocientíficos cognitivos, neurofarmacólogos, neurofisiólogos, neuroanatomistas y neurocientíficos computacionales publicaron la Declaración de Cambridge sobre la Conciencia.
En este documento concluyen que “hay evidencias convergentes que indican que los animales no humanos poseen los sustratos neuroanatómicos, neuroquímicos y neurofisiológicos de los estados de conciencia, junto con la capacidad de mostrar comportamientos intencionales. En consecuencia, el peso de la evidencia indica que los humanos no somos los únicos en poseer la base neurológica que da lugar a la conciencia.
Los animales no humanos, incluyendo a todos los mamíferos y aves, y otras muchas criaturas, entre las que se encuentran los pulpos, también poseen estos sustratos neurológicos”.
Esto significa que los animales son conscientes de sí mismos y del mundo que los rodea y, por lo tanto, lo que les ocurre les produce estados mentales que pueden ser positivos o negativos.
Existe suficiente información, que incluso se refleja en algunas de nuestras normas (como la 033, la constitución del Edo de México, CDMX y otras leyes locales de protección) que reconoce a los animales como seres sintientes.
Desde Igualdad Animal queremos hacer un llamado respetuoso pero categórico a nuestras legisladoras y legisladores: los animales están aquí con nosotros y tenemos la responsabilidad de generar las condiciones para respetar su vida y su bienestar. Debemos ampliar nuestro marco de indignación sobre el maltrato animal y extenderlo a otros animales que permanecen ocultos en granjas y mataderos.