Uno de los efectos secundarios de la pandemia ha sido darle oportunidad a la naturaleza de recuperarse de los efectos de la actividad humana. Una de las más importantes pruebas de lo anterior, ha sido el notable incremento de actividad de las tortugas marinas. No sólo inició antes de lo habitual la temporada de anidación, sino que semana a semana se rompen los records de registro de nidos, 2,200 registrados hasta el 29 de junio en contraste con 846 del 2019, en las playas de Cozumel, Quintana Roo.
Para el presidente municipal, Pedro Joaquín Delbouis, es primordial el garantizar la protección de la Tortuga Marina, y a través de la Subdirección de Ecología a cargo Fernando Pola Rodríguez, el Municipio cuenta con el “Campamento Tortuguero San Martín”, que desde hace 30 años son los que llevan a cabo la protección, conteo y un meticuloso registro de nidos con el tipo de especie de tortuga, número de huevos estimados por nido, fechas de desove y fecha probable de eclosión.
“En esta temporada de anidación hemos visto cambios importantes en el comportamiento de las tortugas marinas, iniciaron antes de lo previsto el arribo y el número de nidos registrados es 260% mayor que el año pasado” dice Edgar G. Sosa Coral, Técnico Responsable del Programa de Protección a la Tortuga Marina del “Campamento Tortuguero San Martín”.
“La nula actividad humana tanto en las playas como en el mar, ya que en ambos casos estuvieron cerrados a toda actividad durante meses, se presume sea la causa de este inusual aumento en el arribo de los quelonios a desovar en las playas de la isla.
Actualmente estamos contabilizando más de 100 nidos cada noche, sin embargo sabemos que por el recurso humano limitado con el que contamos hay muchos desoves que no estamos contabilizando lo que hace pensar que el número real de nidos sea muy superior al que tenemos registrado”, explica Sosa Coral.