Luisa María Alcalde, titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, el Home Office puede ser una nueva modalidad de operación permanente para diversas profesiones, pues la nueva realidad demuestra que se puede trabajar de forma remota sin problema alguno.
Sobre el Home Office, indicó que existen iniciativas legislativas sobre esta actividad y se pueda modificar para que sea adoptada por las empresas. “Es importante que aquello que se pueda mantener a distancia se mantenga de esta forma y disminuir el flujo personal”.
“En general, todos aquellos que no necesitan estar presentes, creo que lo debe de determinar cada una de las empresas, con la posibilidad de que se discuta en el Congreso. La pandemia nos abre esa conciencia para coordinar proyectos, tener reuniones, donde no todo tenga que ser presencial y todo se mantenga a distancia”, dijo.
De acuerdo a un estudio en Latinoamérica señala que en México y Perú el 40% de los encuestados dijeron estar trabajando aún bajo esta modalidad. En la región el país que destacó por tener la tasa más baja de trabajadores home office fue Panamá con sólo un 13%.
El trabajo a distancia, como toda nueva modalidad requiere de ciertas disposiciones. Por ello, el 38% de los latinoamericanos considera que sería necesario contar con equipamiento necesario para trabajar de forma cómoda en el hogar (silla ergonómica, soporte de computadora, cámara web, entre otras); 32% consideran necesario la digitalización de documentos (reportes y archivos importantes), el 29% asesoramiento para incorporar mejores prácticas y el 22% lineamientos para reaccionar de manera rápida ante una situación que requiera presencia física.
Entre los resultados que se presentaron, se descubrió que el 70% de las compañías latinoamericanas no contaba con el beneficio de home office para sus empleados antes de la pandemia. De los seis países entrevistados, destacó que en México es donde estamos más avanzados (38%) en la incorporación de este esquema laboral.