Karla Berdichevsky, directora general del Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva, declaró que el tema de planificación familiar en un contexto de COVID-19 es muy importante de considerar.
Expuso que es un aspecto critico debido a que la pandemia ha convocado a redoblar esfuerzos sanitarios y los servicios de atención sexual se han mantenido abiertos como una prioridad y la población tenga acceso a anticonceptivos, atención al aborto, al embarazo, atención a violencia sexual, etc., sin embargo, la asistencia de personas a ser orientadas ha bajado significativamente.
Reconoció que se prevé un cambió de pautas reproductivas, debido a que muchas mujeres no están usando métodos de planificación y se tiene un estimado de un millón 100 mil mujeres con problemas de su salud reproductiva, aunado a que en muchos casos están violentadas.
Esta situación provocará un estimado de 145 mil embarazos adicionales no planeados que provocará la pandemia. Además de 21 mil 500 embarazos de adolescentes, dicha proyección no estaba en los planes poblacionales de México y lo deseable es que se fomente una estrategia nacional para prevenir los embarazos no planeados.
De esta manera se pueda atender a este factor, pues este hecho conlleva grandes afectaciones en la vida de los adolescentes, sin olvidar que muchos de estos embarazos son causa de violencia sexual y familiar. Se tiene que trabajar con sectores educativos y laborales en los jóvenes que les permita alcanzar sus sueños y evitar esta situación en edades no adecuadas para este hecho natural de la vida.
En el marco del covid-19 se necesita que la gente tenga acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva, sin descuidarse en está época de pandemia.