El uso cotidiano de cubrebocas y caretas para evitar el contagio del SARS-COV2 ha provocado lesiones y úlceras en la cara del personal de salud, que las usan por largos periodos de tiempo, sin embargo, hay personas con mayor sensibilidad cutánea y con una con respuesta más acentuada a la presión y a la humedad. Estas lesiones inician con una zona de enrojecimiento, fisuras y finalmente laceraciones que producen molestia a quien las padece.
Las heridas y lesiones deben ser vigiladas durante esta crisis, ya que también el confinamiento de las familias ha incrementado el número de accidentes en los hogares como: cortaduras, raspaduras y quemaduras, tanto en niños como en adultos, y deben ser atendidas oportunamente para no infectarse.
“La herida tiene un proceso natural de regeneración, sin embargo, cuando a estas lesiones se agrega infección pueden tardar en sanar sobre todo en pacientes con enfermedades crónicas que tienen una respuesta inmunológica baja. Cuando no se trata adecuadamente una herida puede complicarse; de ahí la importancia de acudir al médico ante este tipo de eventos para poder ser evaluado y tratado”, advirtió el doctor Cuauhtémoc Celis González, presidente de la Federación Mexicana de Colegios de Obstetricia y Ginecología AC, (FEMECOG).
Para disminuir los daños a la piel, Armstrong Laboratorios de México ha iniciado una campaña de educación e información sobre la importancia de atender las lesiones oportunamente para evitar dolor, inflamación e infecciones en piel dañada, con su producto Recoverón, que contiene ácido acexámico, un regenerador tisular que acelera eficazmente el proceso de cicatrización de heridas superficiales y profundas sin riesgo de infección.
El Dr. Celis González explicó que el ácido acexámico actúa como regulador del tejido conectivo, lo que permite que haya una epitelización y que no se presente retracción de la herida gracias a su acción proteica. Esta acción regula la producción de células que se llaman fibroblastos, los cuales segregan proteínas de colágeno, lo que ayuda a la cicatrización y regeneración de la piel más rápidamente.
El especialista destaco que Recoverón y Recoverón C (ácido acexámico) se utiliza para heridas sin infección tales como: heridas quirúrgicas o por trauma, episiotomías, ulceras varicosas y de decúbito, quemaduras de 1º y 2º grado, grietas del pezón y heridas quirúrgicas por trauma.
Mientras que para tratar heridas con proceso infeccioso asociado se cuenta con Recoverón N y Recoverón NC que contienen neomicina y que se puede indicar en : Úlceras y escaras de decúbito infectadas, impétigo, ectima, foliculitis, eczema, dermatitis seborreica infectada y grietas del pezón con datos de infección.