La aparición del coronavirus ha impactado al mundo de una manera nunca antes vista. Al extenderse hasta convertirse en una pandemia, el COVID-19 ha forzado un cambio en la rutina de los estudiantes de todo el mundo, desde reforzar los hábitos de aprendizaje, el uso de e-learning, hasta el distanciamiento social de los trabajadores en el mercado laboral.

Holberton School, escuela especializada en temas de programación y software, realizó una encuesta, con el objetivo de comprender cuál es su percepción acerca de las necesidades laborales en el futuro cercano en el marco de una pandemia.

Los resultados muestran que, más de 90% de los encuestados reconoce la importancia de los conocimientos de ingeniería, matemáticas y ciencia como puntos de partida para obtener mejores oportunidades laborales. Incluso casi 80% afirmó estar dispuesto a cambiar de carrera con tal de lograr este propósito.

Sin embargo, para el 66% de las personas, uno de los principales obstáculos que  impiden producir este giro en sus carreras e incluso adquirir nuevas habilidades, se centra en encontrar horarios flexibles para hacerlo, o al menos la opción de tomar capacitaciones especializadas en línea; el 65% reconoce como una barrera los precios poco accesibles; mientras que 49% reconoce que no tiene los suficientes conocimientos básicos para introducirse en carreras relacionadas a la programación o desarrollo de software.

En cuanto a las oportunidades que perciben en un futuro cercano, más del 37% coincide que las habilidades de programación serán necesarias; el 32% considera que estas oportunidades se verán reflejadas en temas relacionados a comercio electrónico; 19% coincide que para el desarrollo de apps; y casi el 10% ve un enfoque relacionado con la realidad virtual.

“Estos resultados nos muestran que en México hay un gran interés por los temas relacionados al desarrollo de software, sin embargo también existen algunos obstáculos para introducirse en estas áreas”, señaló  Philippe Surman, fundador de Holberton School en México.

Añadió que para los mexicanos, la necesidad de adaptarse a la “nueva normalidad” tras el impacto del coronavirus en la actualidad- es cada vez más urgente en tema de preparación profesional. Anteriormente, la población se enfocaba en adquirir trabajos relacionados única y exclusivamente con su trayectoria académica o experiencia adquirida en alguna profesión u oficio, sin embargo, la tendencia se mueve a buscar otros espacios de conocimiento como en la tecnología, programación y creación de software.

Cabe recordar que en América Latina, los pronósticos del daño económico por la COVID-19 son abrumadores. Según una encuesta realizada por la CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe), se pronostica una contracción general del 5.3% para 2020, la peor en la región desde el periodo comprendido entre 1914 y 1930.

La encuesta de la CEPAL también señala que si el avance de la pandemia causa una caída del 5% en el ingreso promedio de la población activa, el número de latinoamericanos que viven en la pobreza extrema aumentará de 67.5 millones a 82 millones.

NUEVAS TECNOLOGÍAS NO QUITAN EL EMPLEO

Las nuevas tecnologías son elementos indispensables para el progreso social y muy pocas actividades, trabajos, políticas o situaciones de la vida cotidiana escapan de tener una intervención de este sector clave en el desarrollo social y humano.

Sin embargo, la automatización de los sectores industriales, la Inteligencia Artificial, el Internet de las Cosas (IoT), son factores señalados como elementos que están poco a poco desplazando al hombre de sus plazas laborales, situación que al largo plazo provocará graves problemas de desempleo.

Situación que es calificado como mentira, pues Alemania y Japón, las naciones con mayor mecanización global, tienen las tasas de desempleo más bajas del planeta, debido a que se diversificó la naturaleza de los empleos, informa la empresa Siemens.

El estudio “El futuro del trabajo. Perspectivas del empleo de la OCDE 2019”, precisó que en el caso de México, los empleos que se perderán al 2030 por la automatización tecnológica serán un poco más de 14%, dada la estructura manufacturera y económica actual.

Javier López Casarín, director de la Fundación Reinventando a México, en relación a la sustitución de la tecnología sobre el hombre, dijo a periódico AM de Querétaro que “es una realidad que desaparecerán trabajos en el futuro cercano, pero se crearán nuevos, así es la realidad de una revolución industrial que promueve que el hombre se enfoque a nuevos estudios y plazas laborales”.

“La tecnología no nos remplazará, sino que nos va a complementar, tal y como paso con las armadoras de autos con las carretas, en la actualidad, lo digital y cibernético es el nuevo sistema global a desarrollar”, explicó.

Aceptó que nuestro país no innova lo suficiente, cuando sólo invierte  un 0.5% en ciencia, tecnología e innovación, siendo el promedio de países de la OCDE de un 2.5% de su PIB y los líderes globales como Japón y Alemania destinan el 4.5% de su PIB a este rubro.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *