Venustiano Carranza, es el nombre de un personaje histórico que ha pasado a sumarse a la lista de individuos que aportaron su vida para la edificación del México actual, sin embargo, la historia suele generalizar y barrer los detalles que, de conocerse, dan una perspectiva diferente a sus protagonistas.
Esta perspectiva es analizada en el libro “Venustiano Carranza”, del sello Crítica, que fue redactado por Felipe Ávila, quien detalla a este reportero que Carranza fue el vencedor de la Revolución y fundó las bases de las instituciones al conjuntar todos los actores políticos de su época y proclamar la Constitución de 1917.
El haberse aislado de la realidad y no ser empático con los problemas sociales, califica como el principal error de Carranza, situación que se achaca a no pedir que su círculo cercano le mantuviera al tanto de la realidad nacional.
Aunado que entre los problemas que provocaron su caída política y derivo en su muerte, fue bloquear el paso del grupo de sonorenses al poder, Álvaro Obregón, Plutarco Elías Calles y Adolfo de la Huerta, él primero era el secretario de Gobierno más aptó para sucederle en la Presidencia, pero al impedirlo, se armó el movimiento de Agua Prieta que lo expulsó de la Presidencia y provocó su muerte.
Para el escritor mexicano, los sonorenses se encargaron de desprestigiar lo que Carranza había dejado de legado y manejaron una imagen de burgués, hacendado y de estar en contra de los caudillos revolucionarios, motivos que provocarán que al paso de los años se desvalorara lo que Carranza fue para México. “No olvidemos que era un hombre de carrera civil y no quería que México siguiera supeditado a los militares, por ello el que buscará frenar a los sonorenses”.
Afirmó que “este libro y demás investigaciones que se realizan de forma constante deben dar su lugar en la historia al Varón de Cuatro Ciénegas, como fue conocido, quien merece ser valorado por conducir la construcción del México moderno.
“Carranza aprendió cómo se hacía política, cómo surgían y se procesaban las leyes, cómo se establecían alianzas y cómo se desarrollaba la lucha por el poder, descarnada, sin cuartel, entre los grupos rivales. La política nacional, vivida desde las entrañas del poder, transformó la visión de ese ranchero y político local que había llegado a la ciudad de México al comenzar el nuevo siglo”.
Ejemplificó que la imagen de hacendado porfirista dista mucho de ser cierta, pues su Hacienda en Cuatro Ciénegas era tierra desértica y fue de los primeros patrones en México que proclamó iniciativas a favor de los trabajadores.
El sociólogo de la UNAM declara que el coahuilense había aprendido las artes de la política, de las alianzas, de la sagacidad y la paciencia, habilidades en las que se convertiría en un consumado maestro, añadió, estas cualidades las mostró al ser Presidente e impedir que las presiones de los Estados Unidos y de Alemania llevarán a México a participar en la Primera Guerra Mundial.
“No olvidemos que la Constitución Política de 1917, fue la primera en el mundo, que considera los derechos sociales de campesinos, obreros y sectores populares; pero se había pasado por alto, por ejemplo, que fue pionero en impulsar la educación de las mujeres, él tuvo dos hijas. Además, también logró regular la operación de las compañías petroleras extranjeras para comenzar a cobrarles impuestos”, dijo.
“Es un personaje esencial en la historia que debe ser reivindicado, tenemos que analizar los hechos y su relación con el México moderno. La historia es un diálogo del presente con el pasado y figuras como Carranza merecen estar en un mejor lugar”, puntualizó.