La Fórmula E es el lugar perfecto para guiar el futuro a un ritmo emocionante, por lo que la marca japonesa Nissan fusiona el conocimiento y la experiencia en la tecnología de vehículos eléctricos (EVs) aplicado al automovilismo.
Nissan, pionero en el diseño y fabricación de EVs, es el primer fabricante japonés que participa en el campeonato. Con más de 500 mil unidades vendidas de Nissan LEAF desde su debut en 2010, Nissan ha aprovechado su experiencia con los EVs para desarrollar el nuevo sistema de propulsión de su vehículo de carreras de Fórmula E.
“Nissan está compitiendo en el campeonato de la Fórmula E para mostrar la visión de Nissan Intelligent Mobility, la cual busca transformar la forma en la que los vehículos son impulsados, conducidos e integrados en la sociedad, y para llevar la emoción del poderoso desempeño de los EVs a los fanáticos de las carreras”, comentó Tommaso Volpe, director global de Nissan Motorsports.
Nissan está aprendiendo lecciones en la pista que se utilizarán para mejorar aún más los vehículos totalmente eléctricos de la compañía, y viceversa.
“Nuestra búsqueda del rendimiento y el éxito en la Fórmula E refleja nuestro espíritu pionero y de liderazgo de muchos años en EVs. La experiencia que adquirimos en la pista informa y acelera el desarrollo de nuestros vehículos de carretera. Las competencias de este año han sido increíblemente emocionantes, y es esta emoción junto con los avances técnicos de gran alcance, lo que da forma a nuestros modelos totalmente eléctricos, como es el nuevo crossover 100% eléctrico, Nissan Ariya”, agregó Volpe.
Por otra parte, los autos de Fórmula E están equipados con baterías de 800 volts y 52 kWh de capacidad. Cada paquete de baterías pesa 385 kilos, más de un tercio del total del vehículo, y son el componente clave en la evolución de los monoplazas y, por ende, del campeonato.
Además de aumentar la potencia del motor y las prestaciones de los automóviles, las llegadas de estas nuevas baterías han permitido que se puedan disputar carreras completas de 45 minutos sin que los pilotos tengan que pasar por pits para realizar un cambio de vehículo, como sucedía en las cuatro primeras temporadas.
Asimismo, los monoplazas entregan en carrera 200 kw (270 Hp) y manejando al máximo todo el tiempo ceden 250kw (335Hp) y aceleran de 0 a 100 km/h en 2.8 segundos, con una velocidad máxima de 280 km/h.
Con respecto a las especificaciones de los neumáticos, éstos son aptos para todo tipo de clima, son recauchutados, de 18 pulgadas y usados por todos los equipos y pilotos.
Las baterías solo se pueden recargar fuera de la sesión de clasificación y carrera, o mientras el vehículo esté en parque cerrado, período en el que los equipos no pueden ni siquiera tocar el vehículo.
Una vez que el monoplaza está en los pits, los técnicos del equipo se encargan de desconectar la batería, siempre con un equipamiento de seguridad que los proteja de cualquier tipo de descarga eléctrica, y posteriormente la conectan a un cargador.
Durante cada carrera del campeonato, cada equipo cuenta con dos cargadores para conectar sus baterías y monitorear su recarga. Se prohíbe cargar el vehículo tanto durante la clasificación como en la carrera, así como en todo el parque cerrado y la verificación técnica. En cambio, los equipos pueden cargar los vehículos entre las sesiones y durante la práctica.
Nissan fue el primer fabricante japonés en entrar a la Fórmula E en 2018. La marca ingresó a la serie para mostrar su visión de Nissan Intelligent Mobility y llevar la emoción del desempeño de los EVs de Nissan a los fanáticos de las carreras en todo el mundo. La temporada 2020-21 será la tercera de Nissan y llega en un momento en que la compañía se prepara para comenzar la producción del crossover totalmente eléctrico Nissan Ariya. De igual forma, coincide con el décimo aniversario de Nissan LEAF, el primer EV del mercado masivo del mundo.
Con una potente aceleración, un nuevo y revolucionario diseño de EVs y una galardonada tecnología de asistencia al conductor, el nuevo Ariya personifica la visión de Nissan de transformar la forma en que se impulsan, conducen e integran los vehículos en la sociedad. La séptima temporada del Campeonato Mundial de Fórmula E ABB FIA está programada para comenzar el 16 de enero en Santiago, Chile.