La misión en Wuhan, China realizada por expertos internacionales, de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado que el virus que ha provocado la pandemia por COVID-19 tuvo un origen animal. Con esta declaración se desacredita la teoría de que el patógeno pudiera haber surgido de un laboratorio, considerando que la teoría más probable contempla el paso a una especie intermedia, aún no identificada, y de allí al ser humano.
Los expertos también consideraron improbable que esto se encontrará en Wuhan, como hasta ahora se había señalado, al no hallarse una gran circulación del virus en ninguna especie animal. Sin embargo, coinciden en que la transmisión a través de un huésped animal intermedio es la causa más probable.
Cabe mencionar que hace unos meses y luego de adentrarse a la entrañas de varios mercados húmedos de India, Vietnam y China y en rastros clandestinos de México, la organización mundial Igualdad Animal advirtió sobre el origen zoonótico de este virus, repasando la serie de enfermedades que ha padecido la humanidad derivadas de la relación que se tiene con los animales y los sistemas de producción de alimento cárnico.
“Los hábitos de la vida moderna, como la deforestación, la urbanización y la agricultura intensiva, contribuyen a la aparición de nuevos contagios a un ritmo alarmante”, dijo, Dulce Ramírez, directora de Igualdad Animal México.
Varios factores aumentan el potencial de que patógenos salten de animales a humanos, entre ellos: Invasión a los ecosistemas naturales. A medida que la población mundial se ha expandido, los humanos se han apoderado de las áreas silvestres a un ritmo rápido.
Nuevos asentamientos y operaciones como la tala y la minería acercan a las personas a los animales salvajes.
Consumo de animales silvestres. Ha habido un creciente comercio de animales silvestres, especialmente para alimentos. En mercados de animales vivos, los animales domésticos y silvestres se mantienen enjaulados con mucha proximidad entre ellos y se matan en condiciones antihigiénicas.
Hay que recordar que el virus que causa el COVID-19 no es el primer virus que se relaciona con el comercio y el consumo de animales vivos. El brote de influenza aviar en 2005 y la influenza de la gripe porcina en 2009 que saltó de los cerdos a los humanos y el MERS -Síndrome respiratorio de Oriente Medio en 2012.