Uno de los temas más importantes de aquí hasta 2050 es el agua. Contar con ella es prioridad de la población, los gobiernos y la industria a nivel global. Contribuir con métodos de producción agrícola eficientes es uno de los pasos para garantizar su disponibilidad. A nivel global, alrededor de 70 por ciento del agua dulce disponible se destina a la agricultura y la ganadería, mientras que en México, el porcentaje aumenta a 76 por ciento, de acuerdo con datos de la Organización de las Naciones Unidas.
Pese a que la ganadería es relacionada con la agricultura por ser actividades que se desarrollan en campo, su relación es más estrecha, pues 40% de los cereales que se producen en el mundo es exclusivamente para alimentar animales destinados a la producción de carne.
Ante este panorama, y en conmemoración del Día Mundial del Agua (22 de marzo), Syngenta, cuenta con tecnologías que disminuyen el consumo de agua e incrementan la productividad de los cultivos, sin requerir más terreno de siembra.
Javier Valdés, director general de Syngenta para México y América Latina, destacó el papel de México como uno de los principales productores de alimento, y el compromiso de Syngenta en el ahorro de agua. “En México no es posible aumentar la superficie cultivable, por lo que la única opción es incrementar la productividad por hectárea. Por ejemplo, en el caso del maíz, actualmente es de 3.4 ton/ha, pero con tecnología es posible llegar a 10 ton/ha, sin elevar el consumo de agua”, señaló.
De acuerdo con el último Informe del Medio Ambiente, de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, en nuestro país, la disponibilidad natural media de agua es de 451.6 kilómetros cúbicos de agua en promedio al año (Conagua). De ese volumen, alrededor de 80% corresponde al escurrimiento superficial nacional (359.04 km3) y 20% (92.5 km3) contribuye a la recarga de los acuíferos.
El valor de la disponibilidad natural media nacional resulta superior al de la mayoría de los países europeos, pero es bajo en comparación con países como Canadá (2,902 km3), Estados Unidos (3,069 km3) o Brasil (8,647 km3).
Syngenta realiza acciones para disminuir el uso de agua, apoyar el desarrollo y la productividad en el campo, cumplir con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por la Organización de las Naciones Unidas en la Agenda 2030 y alcanzar las metas establecidas en la segunda edición del Good Growth Plan a través de la innovación y la tecnología: producir semillas mejoradas que requieran menos recursos y con ello proteger la tierra para cultivo.
“Lo que busca Syngenta es producir cada vez más en la misma superficie que tenemos porque hemos llegado al límite de las fronteras agrícolas, no podemos seguir deforestando selvas o bosques. En esos mismos espacios tenemos que producir más y eventualmente, con menos recursos: agua, mejor suelo y menos insumos agrícolas”, reconoció Montserrat Benítez, líder de Sostenibilidad y Negocio Responsable de Syngenta LAN.
En los próximos 30 años, las necesidades alimentarias a nivel global requerirán un aumento de 60 por ciento en la producción agrícola y para avanzar hacia un uso sustentable del agua es necesario aumentar la eficiencia del sector agrícola, esto es, reducir su consumo de líquido y aumentar paralelamente la producción obtenida. Además de contribuir a detener el aumento de su demanda, el aumento de la eficiencia puede ayudar a reducir la competencia entre los sectores consumidores del líquido y la presión sobre las fuentes de abasto.
“Syngenta busca reducir el uso de agua en la agricultura a nivel global, para ello cuenta con un área de I&D a la que se destina 10 por ciento de la utilidad global, alrededor de 1,300 millones de dólares, y está enfocada en contribuir a que las plantas sean más resistentes, el suelo más saludable y el consumo de agua, mínimo”, finalizó Javier Valdés.