Se lanzó al mercado el primer teléfono inteligente que marca los nuevos estándares de ligereza, diseño delgado y sostenibilidad: el Carbon 1 MK II de la start-up berlinesa Carbon Mobile. «Diseñado y fabricado en Alemania, el Carbon 1 MK II reactiva la miniaturización e impulsa la sustentabilidad en los dispositivos al reemplazar por primera vez plásticos y aluminio con materiales compuestos avanzados» asegura el CEO de la marca Carbon Mobile, Firas Khalifeh.
El material base para la producción de la carcasa es un compuesto termoplástico de la gama de productos dynalite de LANXESS Tepex. Está reforzado con tejidos de filamentos continuos de fibra de carbono 1K increíblemente finos.
«Nuestro material compuesto consigue mucho más que permitir espesores de pared excepcionalmente delgados. De hecho, con su alto grado de resistencia y rigidez, también ayuda a que la carcasa sea muy robusta para uso diario» explica el experto en desarrollo de aplicaciones de Tepex en LANXESS, Philipp Genders.
A pesar de sus propiedades avanzadas para producir estructuras robustas pero ligeras, las fibras de carbono se comportan como un blindaje electromagnético. Esto significa que bloquean las señales de radio, dispersándolas por el cuerpo exterior del dispositivo. Hasta ahora, los dispositivos conectados con fibra de carbono habían sido considerados como imposibles por parte de la industria.
Después de cuatro años de investigación y desarrollo, los ingenieros de Carbon Mobile desarrollaron un proceso revolucionario para desbloquear el potencial de la fibra de carbono para los dispositivos móviles.
La tecnología patentada HyRECM (Hybrid Radio Enabled Composite Material) fusiona fibras de carbono con un material compuesto complementario capaz de penetrar la señal de radio frecuencia. Para impulsar aún más la conectividad se integra una tinta conductora única impresa en 3D en la estructura de fibra de carbono. El resultado es el primer material a base de fibra de carbono «habilitado para radio». Aplicada por primera vez en el Carbon 1 MK II, la nueva tecnología produce una estructura de carcasa robusta increíblemente delgada y liviana, que también está hecha con menos de un cinco por ciento de plástico.
Bajo el mismo principio de fabricación que el del chasis de un Fórmula 1, la carcasa está diseñada como una «carcasa única». El resultado es el uso optimizado de la extrema rigidez del plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP), lo que contribuye significativamente al fino grosor de las paredes y al bajo peso de este teléfono inteligente.
La miniaturización se consigue gracias a la ausencia de un refuerzo voluminoso que ocupe espacio en el interior de la carcasa. Según Khalifeh, «nuestro diseño monocasco de vanguardia permite un dispositivo que pesa 125 gramos, un tercio más liviano que los teléfonos inteligentes convencionales. Con sólo 6.3 milímetros, también es un 25 por ciento más delgado».
El nuevo teléfono inteligente utiliza sólo materiales reciclables siempre que sea posible. El material compuesto utilizado para la carcasa también se puede reciclar y reutilizar fácilmente para nuevos usos. «Como todos los productos de la línea de productos Dynalite de Tepex, se puede triturar y luego procesar en máquinas de moldeo por inyección estándar para fabricar componentes de alta calidad, ya sea por sí mismos o mezclados con material nuevo» explica Genders.