El inventario actual de oficinas en Querétaro y área metropolitana supera los 500 mil m², con una tasa de disponibilidad de alrededor del 19 por ciento, principalmente en las zonas corporativas tradicionales que han perdido competitividad frente al perímetro central de la ciudad, donde crecen sectores de sistemas de coworking, edificios corporativos, etc.
Además que “el mercado de bienes y servicios para empresas establecidas en Querétaro está globalizado y se sujeta a la influencia de lo que sucede tanto en México como en América del Norte y China, principalmente”, señaló Franz Esteves, director para el Bajío de Coldwell-Banker Commercial México.
“En Querétaro existe una tendencia clara de migración de empresas hacia el perímetro central de la ciudad, especialmente las pequeñas y medianas empresas (PyMES) de proveeduría, pues arrendar oficinas en esa zona les permite acceder a precios más accesibles por m² y una mayor cercanía a las zonas donde vive el grueso de los trabajadores, todo a la mano evitando mayores traslados”, explicó.
Aunque la contingencia sanitaria continúa generando presión sobre la actividad productiva de Querétaro, los principales sectores industriales establecidos en el estado cerraron el primer trimestre de 2021 con valores positivos y una sólida proyección de recuperación, indica la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX).
Esto, principalmente, gracias a los efectos de la integración regional con América del Norte, pues los principales clientes de la industria queretana -como las empresas estadounidenses de manufactura- han incrementado su demanda este año al verse beneficiados por los estímulos económicos de los gobiernos de Estados Unidos y Canadá.
A nivel nacional, Querétaro se ubica entre los cinco estados que mayor participación tienen en cuanto a la demanda del subsector inmobiliario corporativo, en donde la Ciudad de México representa 31 por ciento de la demanda total de inmuebles corporativos, que durante el 2020 tuvo una caída en la demanda del 7 por ciento.
Dichas entidades y sus porcentajes es Ciudad de México: 30.93 por ciento; Estado de México: 11.05 por ciento; Nuevo León: 11.03 por ciento; Jalisco: 6.36 por ciento; y Querétaro: 5.86 por ciento, detalla la empresa inmobiliaria Lamundi.
“La realidad es que la ciudad de Querétaro se ha mantenido como un polo atractivo para la inversión y por ende, para el arrendamiento de oficinas. Sin embargo, las solicitudes que llegan ahora provienen de dos tipos muy específicos de empresa: las extranjeras que siguen buscando espacios para establecerse aquí y las locales, que se han adaptado a que la mayoría de sus empleados trabajen desde casa y buscan mudar su personal clave a oficinas de menor tamaño, céntricas, peatonales y con servicios incluidos”, puntualizó Angélica Soto, directora del centro Órbita Coworks.
Añadió que “los arrendadores de oficinas debemos adaptarnos a la nueva realidad para mantener el dinamismo del mercado en Querétaro. En este momento la clave es ofrecer oficinas bajo esquemas no tradicionales, como son los espacios compartidos, donde también se evita que sea un solo inquilino quien absorba los costos de servicios y derivados”, señaló Soto, cuyo centro de oficinas en el centro de Querétaro traerá a la zona una derrama de 20 millones de pesos en 2021.
En México la desocupación de oficinas a nivel nacional se encuentra al 21 por ciento, sin embargo, el sector ha comenzado a reactivarse dándole otra oportunidad al modelo de coworking. El modelo sigue siendo rentable, ya que actualmente se está presenciando un aumento en la demanda de estos espacios.