En México crece el impacto de la agricultura protegida que genera alrededor de 240 mil empleos directos, 300 mil indirectos, de acuerdo con información de la Asociación Mexicana de Horticultura Protegida (AMHPAC), esta forma de cultivo genera incremento de productividad de cultivos, ahorro de tierra y agua, así como mitiga el impacto del Cambio Climático en la producción de alimentos.
Al respecto, José Navarro, director general de Tarsus México y especialista en temas de negocios, indicó a este reportero que la agricultura protegida (uso de viveros para cosechas), está en franco crecimiento en México, pues hace 15 años se contabilizan 132 hectáreas bajo este esquema; en la actualidad suman más de 54 mil hectáreas.
Destaca el caso del centro y bajío (especialmente la franja de Querétaro, Guanajuato, San Luis Potosí, Aguascalientes y Jalisco) del país con más de 21 mil de dichas hectáreas que se dedican a berrys, flores, pimientos, jitomates, pepinos, entre otros, que son productos de venta inmediata en México como de exportación en especial a los Estados Unidos.
“El uso de viveros para agricultura protegida es de acceso general para los productores, pues se tienen viveros con poca tecnología que requieren una inversión de un millón de pesos hasta viveros muy tecnificados con Inteligencia Artificial que tienen costos de hasta 15 millones de pesos; es decir, es un mercado para todo tipo de producto, región y bolsillo del campesino productor”, acotó.
En Querétaro, se congratuló de que se cuenta con el AgroParq que tiene diversos esquemas de agricultura protegida que permite ser un ejemplo a nivel nacional de la forma de utilizar los viveros agrícolas y que brindan cosechas de exportación. Un sistema de viveros permite que se controlen las inclemencias del tiempo y permite un ahorro de hasta un 90 por ciento del uso de agua de riego, ejemplificó.
El también director del evento GreenTech Americas 2021 que se desarrollará en Querétaro, explicó que la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) cataloga a toda la franja de Querétaro hasta Jalisco, como de los sitios más idóneos para el desarrollo de viveros de producción agrícola y producción de alimentos, en especial con la sequía que azota a la región y que se debe ir previendo que a futuro se requerirán de más producción de comida para los mexicanos.
“No olvidemos que la agricultura es un sector con variables muy difíciles de controlar como es el clima, la lluvia, la sequía, las plagas, etc., por ello, los sistemas de agricultura protegida son el futuro para el sector agroalimentario”, indicó.
Estimó que la participación de instancias oficiales como de sectores financieros en la difusión de este tipo de tecnologías agrícolas es esencial y permitan que los campesinos tengan acceso a créditos que les permitan tener acceso a sistemas de viveros.
Cabe recordar que en el Centro de Congresos de Querétaro se desarrollará GreenTech Americas 2021, una plataforma global para todos los profesionales de Latinoamérica involucrados en horticultura protegida; actividad a presentarse de forma presencial del 24 al 26 de agosto 2021.
Durante la pandemia más de 60 mil hectáreas de agricultura protegida hortofrutícola y la agroindustria se han manejado con los protocolos sanitarios correspondientes para proteger a los jornaleros y empleados, así como la decisión bilateral de continuar el flujo de productos agroalimentarios en la frontera con Estados Unidos.
Según la AMHPAC, los invernaderos generan 10 mil nuevos empleos anualmente. Estos lugares, además de cumplir la función de sembrar y cosechar hortalizas fuera o dentro de temporada, otorgan un mayor control sobre el ambiente dado que arrojan resultados sobre qué tierra es más viable, tiempo de crecimiento de la planta, aplicación de fertilizantes, riego, luz, sombra, etc.
Datos del INEGI indican que existen más de 10 millones de personas que trabajan en el campo. 56% son agricultores, 6 de cada 10 campesinos padece pobreza, 44% son trabajadores de apoyo (peones y jornaleros) y 11 de cada 100 campesinos son mujeres.
En México, un país con más de 120 millones de personas que alimentar, la agricultura es una de las industrias más importantes. Según la Encuesta Nacional Agropecuaria de México (ENA), nuestro país cuenta con 110 millones de hectáreas para uso agrícola, dentro de las cuales se producen tres millones de toneladas de tomates al año.
De acuerdo con el reporte de vulnerabilidad de la Secretaría de Agricultura federal (Sader) había al menos 1.7 millones de hectáreas en todo el país de maíz, trigo y frijol sin cosechar en zonas de alta vulnerabilidad; en Guanajuato, Querétaro y Sonora se presenta la mayor vulnerabilidad, con 158 mil hectáreas; además de que hay 800 mil hectáreas con vulnerabilidad media y 348 mil hectáreas siniestradas por la sequía.