La pandemia por COVID-19 no sólo trajo retos económicos y de salud, sino también desafíos educativos que podrían aumentar el riesgo de vulnerabilidad económica de los niños y jóvenes durante su adultez, debido a que al aumento en la deserción escolar por la pandemia se suma el hecho de que la mayoría de ellos no tienen conocimientos básicos de educación financiera, que les permitirían enfrentar de mejor forma los retos económicos y sociales por venir.
Ante esta situación y con el objetivo de abrir un espacio de reflexión y análisis para destacar la importancia de fomentar la educación financiera entre los niños y jóvenes para contribuir a reducir su vulnerabilidad económica durante la edad adulta, Provident y Save the Children en México realizaron su Responsibility Talk.
Durante esta sesión virtual, Rosario Avilés, miembro de Capitalismo Consciente y del Consejo del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección, del IPADE Business School, resaltó que según datos del INEGI cerca de 5.2 millones de estudiantes de entre 3 y 29 años no se inscribieron en el ciclo escolar 2020-2021; de ellos, 2.3 millones no lo hicieron por temor a la pandemia y 2.9 millones por la falta de recursos económicos.
Alejandro Martí Bolaños Cacho, director de Asuntos Corporativos de Provident, comentó en la sesión virtual que la deserción escolar impacta las posibilidades de desarrollo y crecimiento económico de los niños y jóvenes durante su adultez, situación que sumada a la baja y en ocasiones nula educación financiera que tienen, aumenta la posibilidad de que sean más vulnerables económicamente durante su edad adulta.
Por su parte, Mariana Valdés, directora nacional de Alianzas Estratégicas de Save the Children en México, resaltó que los derechos, el presente y el futuro de los casi 40 millones de niñas, niños y adolescentes en México, están en alto riesgo. “La pandemia llegó en un contexto ya adverso para los derechos de la niñez y adolescencia, con una débil estrategia integral para garantizarlos y una inversión pública reducida. Incluso, el CONEVAL estima un incremento de alrededor de 10 millones de personas en situación de pobreza, lo que sirve como preludio de un aumento en el trabajo infantil”, expresó.
De acuerdo con un estudio realizado en 2020 por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), 7 de cada 10 mexicanos presentan rezago en educación financiera, lo que pone en evidencia la responsabilidad que como sociedad tenemos de educar a nuestros niños y jóvenes en los principios básicos de finanzas personales, fomentar los hábitos de ahorro y el uso adecuado de servicios financieros, para contribuir a que nuestros futuros adultos puedan enfrentar mejor los retos económicos que se presenten, comentó Martí Bolaños Cacho.
“Sabemos que la educación financiera es básica para lograr que las personas puedan tomar decisiones informadas respecto al manejo de sus recursos durante su edad adulta, es por eso que de manera permanente impartimos el taller Hablemos de dinero a niños, jóvenes y adultos, y organizamos foros como el Responsibility Talk para destacar la importancia de que más personas tengan una mayor educación financiera para mejorar sus posibilidades de desarrollo y bienestar en el mediano y largo plazo”, aseguró.