La venta de electrodomésticos se disparó a partir de la segunda mitad del 2020 y como consecuencia de la pandemia, ya que los hábitos de consumo cambiaron debido a que las familias se encontraban más tiempo en sus casas. De esta forma, la cocina se convirtió en uno de los lugares más socorridos, no solo para comer, sino para convivir.
Derivado de este fenómeno, empresas como Koblenz tuvieron que elevar su producción 20-21, lo que trajo consigo una mayor presencia de artículos como licuadoras, hornos, tostadores, cafeteras en los hogares de las familias mexicanas, indicó Georgina Pedraza, gerente de la división de Enseres de la firma.
Este tipo de enseres sin duda hacen la vida más sencilla, incluso para elaborar platillos dignos de un chef, pero también aquellos que no requieren de tiempo, pero sí de calidad y nutrición, para satisfacer el paladar y gustos de todos los miembros de la familia.
Fue así que la compañía mexicana con más de 60 años de presencia en el mercado mexicano, se encargó de lanzar atractivos diseños, pues los enseres se convirtieron en una de las principales compras del hogar. Por ello, el 2021 representa un año de recuperación para la industria de electrodomésticos y de acuerdo con datos proporcionados por la Koblenz, se espera que la ésta concluya el año con un crecimiento a doble dígito respecto al año anterior.
Si la cocina ya tenía un encanto especial antes de esta situación a nivel mundial, actualmente ya se convirtió en el “corazón del hogar”, desde donde surgen recetas para chuparse los dedos y todos se divierten.