Aunque no es algo nuevo (¿quién no heredó de niño la ropa que dejaban nuestros hermanos o primos), el interés por usar ropa de segunda mano va en aumento, haciendo que la práctica del fast fashion vaya quedando obsoleta.
Se trata de prendas que, aunque ya fueron utilizadas previamente por alguien más, están en muy buenas condiciones y cubren las “tres B” (bueno, bonito y barato); incluso, puedes encontrar piezas de marcas exclusivas a precios más accesibles que si las compraras en una boutique.
Esta tendencia ofrece varias ventajas:
– Representa un gran ahorro para tu cartera, ya que la ropa de segunda mano es mucho más económica, por lo que puedes comprar más prendas con el mismo presupuesto que estarías destinando a una sola pieza completamente nueva. Esto te da la posibilidad de renovar tu clóset sin tener que desembolsar mucho dinero.
– Es amigable con el medio ambiente. La industria de la moda es una de las más contaminantes, ya que causa el 10% de las emisiones de gas invernadero a nivel mundial y es el segundo sector que más agua necesita para la producción de prendas. Por eso, al adquirir ropa de segunda mano, estás contribuyendo a mitigar el impacto ecológico que genera la producción textil. ¡Una buena manera de fomentar la moda sustentable y el consumo responsable!
– Gracias al internet, la ropa de segunda mano ha tomado un fuerte impulso y hoy en día existen distintas plataformas como GoTrendier que te permiten acceder a este tipo de prendas de manera fácil y segura. Ahí encontrarás una variedad de modelos según tus gustos, incluyendo marcas de lujo como Calvin Klein, Michael Kors, Tony Burch, entre otras, con descuentos de hasta casi 80% y en tu primera compra el envío es gratis.
¡Aprovecha los beneficios de comprar ropa de segunda mano y únete a la tendencia de moda sustentable!