La tecnología se ha convertido en una herramienta que nos permite resolver, programar y hacer eficientes muchas de nuestras actividades diarias; la utilizamos a nuestro favor, nos permite estar más cerca de aquellas personas que son importantes para nosotros y habilita un sinfín de posibilidades que hace unos años eran impensables.
En el caso particular de México, en 2021 el número de usuarios de smartphones fue calculado en aproximadamente 84,4 millones y se estima que supere los 95 millones en 2025, evidenciando que mientras el uso de dispositivos móviles se intensifica, la oportunidad de mejorar la calidad de vida de los usuarios incrementa –y debe ser aprovechada–.
En ese sentido, entre los espacios donde la tecnología se ha vuelto crucial después de una pandemia que nos cambió la forma de ver y vivir el mundo, se encuentra el sector salud. Y es que, a través de mensajería instantánea, llamadas, mensajes de texto y aplicaciones móviles, la atención médica y psicológica, así como el impulso a hábitos saludables entre la población, han evolucionado significativamente. Compartimos algunos ejemplos de ello:
Citas virtuales. Ya no es necesario acudir a un consultorio u hospital de manera presencial: nuestros teléfonos, tabletas o computadoras nos han permitido tener un diagnóstico a algunos padecimientos gracias a citas virtuales que reducen los riesgos de traslado y agregan inmediatez en el tratamiento y seguimiento a pacientes.
Aplicaciones y portales médicos. Ambos representan una gran alternativa si lo que se busca es un primer acercamiento, ya que en muchos casos cuentan con un directorio de especialistas que hacen más sencilla la búsqueda, dependiendo de las necesidades específicas del usuario.
Programas de ejercicio online. La practicidad de poder hacer ejercicio en nuestros hogares trajo muchas ventajas para mantenernos activos y no perder esa parte de nuestra vida a raíz del confinamiento. Además, algunas de estas plataformas, aplicaciones y hasta videos en línea, cuentan con consejos de nutrición para complementar los entrenamientos.
Monitoreo en tiempo real. A través de los wearables, que comúnmente nos acompañan en las rutinas de ejercicio, podemos acceder a mediciones más allá del ritmo cardiaco y las calorías que quemamos. Hoy en día, algunos accesorios digitales (relojes, pulseras, lentes y hasta ropa inteligente) se han convertido en herramientas que, conectadas a nuestros smartphones, pueden hacer electrocardiogramas, medir la oxigenación en sangre y detectar irregularidades. Además de que, si llegara a ocurrir un accidente, pueden acceder e incluso conectarnos a los servicios de emergencia.
Lo anterior es muestra de nuestro día a día, pero será gracias a nuevas tecnologías como el 5G que las mejoras en la capacidad y latencia de la red en los años por venir permitirán usos revolucionarios y aplicaciones de alto impacto. Es por eso que en AT&T México creemos que toda nueva tecnología debe tener un propósito y estar enfocada en beneficiar a todas las personas, y 5G no debe ser la excepción.