El diputado federal del Partido Verde, Javier Joaquín López Casarín, presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados federal, resaltó el trabajo del estado de Querétaro en el fomento a la ciencia y tecnología e impulso a una educación media y superior con enfoque en la alta industria, para que los jóvenes en día de mañana tengan las capacidades laborales que exige la economía 4.0.

“Querétaro es parte de la región que mayor crecimiento económico tiene en el país; tanto la autoridad y las empresas invierten en sectores aeroespaciales, manufactura y logística, etc., con apoyos al desarrollo e investigación e impulsan los ecosistemas digitales», expresó.

El planteamiento federal es que todo el país tenga impulso al mundo digital y tanto el bajío como el resto del país avancen en un punto esencial que es el acceso a la Internet, que impulsa la economía digital.

“Exhortamos al Congreso del estado de Querétaro a que prioricen la ciencia y tecnología, que deben ser una política prioritaria en toda entidad del país”, acotó.

Aceptó que las Startups mexicanas están limitadas debido a que no existe capital de riego que les apoye y cuando son siguen financiamiento se les pide altos intereses y hasta ser dueños de acciones de los proyectos.

Dijo que en México no se rebasa el 0.4 por ciento del PIB en inversión en ciencia y tecnología a nivel federal, pese a que la ley marca que se requiere de un 1 por ciento, y de lo invertido en México, gran parte son dineros privados.

El diputado argumentó que el país tiene diversos proyectos internacionales que le obliga a apostar a la ciencia y tecnología, agregó que se avanza poco a poco, como fue la participación de La UNAM en el telescopio internacional de la NASA; igualmente se debe avanzar en la patente de proyectos.

Descalificó las palabras de la titular del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), María Elena Álvarez, quien clasifica a varias ciencias modernas como “ciencia neoliberal’; el legislador federal enfatizó que la ciencia es ciencia y no existe eso de ciencia neoliberal, abundó que, no será un sexenio federal perdido en ciencia, pese a la cancelación de fideicomisos y becas canceladas. Pues las universidades siguen investigando y pese a los conflictos oficiales.

Cabe mencionar que una profesión muy socorrida en la actualidad y requerida por la economía digital son los programadores, que en 2018 eran 20 millones de profesionales alrededor del mundo y al 2026 serán 26 millones de personas capacitadas en dicha carrera.

Por su parte, Miguel Alegre, CEO de ISDI Digital Business & Tech School México, explicó que el fortalecimiento del ecosistema emprendedor requiere una sinergia del gobierno y de las empresas. “No debemos ser solo una nación de tránsito de los grandes proyectos y negocios digitales”.

Se requiere establecer una agenda nacional en innovación y como país enfrentar los retos digitales que marca el presente. Aunado a impulsar la formación del talento, que no es sólo pensar en jóvenes sino en todos los adultos que deben irse capacitando para llevar una economía digitalizada. “Ese talento adulto ya trabaja y se ve en la necesidad de reconvertirse y digitalizarse, para crecer profesionalmente. Es urgente adaptar a la gente, pues la media de edad está creciendo y las personas tienen que trabajar».

Comentó que los programas educativos no pueden seguir de forma tradicional y la mecánica educativa debe responder a las necesidades de la sociedad. Se necesita una metodología y formación sea ejecutable de forma pronta en la vida diaria; así como asegurar que las personas tenga la competencia que le hagan ser productivo en el mundo laboral.

Finalmente, Ignacio de Pinedo, fundador ISDI Digital Business & Tech School, dijo que una persona mayor debe aprender e incorporarse al mundo digital, pues la expectativa de vida crece y las personas deben estar actualizadas en sus conocimientos para mantenerse en el mundo 4.0. “Debemos acostumbrados a aprender en toda la vida y se debe seguir capacitándose en todo momento”.

A su vez, Antonio Saracho, CEO de Coopel México, detalló que la iniciativa privada es quien ha hecho fuerte a la innovación y dichas empresas en muchas ocasiones son de capital estadounidense, ejemplificó que la marca que representa tiene un hub de 2 mil programadores en Sinaloa que se convierte en un polo de desarrollo en dicha región.

México por el tamaño de país puede crecer, pero requiere de mayor infraestructura, agregó que la COVID-19 impulso un mundo más complejo para consolidar la ciberseguridad y atender las nuevas necesidades tecnológicas de las empresas y gobiernos.

El principal problema de la transformación del mundo es decir que es digital. El primer punto que deben entender las empresas es cambiar en algo que aún es una incógnita, como son las apuestas al blockchance que da posibilidad de tener un registro público digital inviolable.

El Coopel dijo que de no aprender se desaparecerá como son las oficinas de licencias y muchas áreas que han sido rebasadas por la misma tecnología, la realidad y la propia naturaleza.

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