México a nivel nacional vive una brecha inmobiliaria que demanda la construcción de 800 mil viviendas anuales dentro de los próximos 20 años, de acuerdo con el estudio “Reflexiones en torno a la Evolución del Mercado de la Vivienda: Suelos y Realidades», realizado por académicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), en alianza con la proptech La Haus.
En el caso especificó del estado de Querétaro, la brecha de vivienda indica que se requiere la construcción de 12,000 viviendas anuales durante dicho periodo.
Dicha cifra puede agudizarse debido a la constante recepción de nuevos habitantes a la entidad, quienes, de acuerdo con el Consejo Nacional de Población (CONAPO), en 2030 alcanzarán un volumen de 2 millones 646 mil 299 personas.
El estudio explica que para cubrir el déficit de vivienda en Querétaro se requieren de 2022 a 2042 la construcción de 240 mil viviendas.
Además de necesitar más de 4,800 hectáreas para consolidar los nuevos desarrollos. “Debido al potencial crecimiento que tiene el estado, la vivienda vertical será una opción para sus residentes e inversionistas inmobiliarios, con la cual harán frente a un problema clave en la industria inmobiliaria: la vivienda informal, identificada con la autoconstrucción e invasión de predios.
También se abordará el aprovechamiento de suelo, creación de infraestructuras y el financiamiento de unidades funcionales”, comenta Jerónimo Uribe, CEO y cofundador de La Haus.
Cabe mencionar que los habitantes de Querétaro tienen interés en adquirir vivienda; sin embargo, según datos del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (INFONAVIT), se registra un importante número de créditos sin utilizar, esto se podría deber a tres situaciones principales: la baja absorción de prototipos que se manejan, las condiciones de los intereses del crédito y la búsqueda de otras formas de financiamiento.
Aunque existan instituciones que apoyen a la adquisición de un inmueble, los queretanos ven complejo adquirir un hogar, debido en cierta forma a un mercado laboral muy movible y endeble con una alta inflación, así como de salarios castigados.
“ Trabajamos por generar medidas de acción ante tal brecha; sin embargo, eso podrán verlo en nuestra segunda y última entrega del estudio, donde, con una visión internacional, intentamos generar una nueva opción para el país”, mencionó.
El reto inmobiliario contempla la necesidad de construir más y mejores espacios, dar acceso a las personas a un hogar de calidad, y también debe mirar hacia la necesidad de construcción sustentable bajo modelos que eviten una crisis hídrica, contemplen el uso de la energía, generen esfuerzos para disminuir el uso del auto y tengan un manejo más consciente de la basura.
“Querétaro es hoy uno de los destinos sin playa más atractivos del país, no sólo como oportunidad de vivienda, también de inversión. Vemos un creciente interés por construir vivienda vertical, suceso que responde a un crecimiento constante como el de nuestro Estado. Colaborar y construir con base en la planeación, debe ser la construcción del próximo año, casos como Zibatá y Zakia, son ejemplos que se podrían convertir en referentes en temas de vivienda estructurada y bien planeada”, comenta Gerardo Diener, Hub Manager de La Haus Querétaro.
En la primera entrega del estudio los expertos aseguran que entender el fenómeno inmobiliario, permitirá arrancar el camino hacia la cooperación y el trabajo en equipo que formule políticas públicas y planes de acción que cambien el rumbo de la industria inmobiliaria en México.
“Hoy es clave maximizar el uso del suelo para aumentar la densidad y construir soluciones dentro de las ciudades; aún hay un largo camino por recorrer en dónde todos los actores del sector debemos sugerir soluciones que partan de un análisis detallado, específico y continuo, el objetivo clave de hacer este trabajo”, concluyó Uribe.