Para los antiguos mayas, los cenotes o “Dzonot” que significa abismo, representaban un lugar sagrado y eran considerados como fuente de vida que proporciona el más puro de los líquidos vitales; ya que el agua jamás se había visto corrupta por la luz, haciendo de ésta el elemento principal de muchos de los rituales que practicaban. Además, también los consideraban como la puerta de entrada a Xibalbá, el otro mundo y centro de comunión con los dioses.
En la actualidad, los cenotes continúan representando un papel importante dentro del pueblo maya, ya que son origen de gran misticismo y preciosas leyendas; además de ser uno de los escenarios más cautivadores de la Península, seduciendo a quienes los visitan, con sus aguas cristalinas y la exuberante vegetación que los rodea.
Este 2023, inicia con el pie derecho, y en los próximos puentes vacacionales es factible el conocer los cenotes del estado de Yucatán y dejarse enamorar por sus casi 400 km de playa, hermosas haciendas henequeneras, magníficas zonas arqueológicas que forman parte de las grandes maravillas del mundo, Pueblos Mágicos y su bella ciudad cosmopolita, capital gastronómica y cultural del sureste mexicano.
Pero, sobre todo, disfrutar de sus mágicos cenotes. algunas de sus opciones que no se pueden perder y que son la opción ideal para recargar de energía en cualquier época del año son:
En Mucuyché, además de recorridos guiados en los que se revive el auge de una de las haciendas más prósperas de Yucatán durante la época del henequén, es posible nadar en el cenote “Carlota”, que recibe a sus visitantes con espléndidas aguas cristalinas.
Este cenote debe su nombre a que, en el año de 1865 la emperatriz de México, Carlota, durante su viaje a la Península de Yucatán con destino a la ciudad de Campeche, visitó Mucuyché, convirtiéndose en la primera persona en bañarse en las aguas de su cenote.
Por otro lado, el cenote Chunkuy forma parte de la red de cenotes de Cuzamá, siendo uno de los nuevos tesoros de la población que abrió sus puertas al público en el año 2021.
Para llegar a él, se debe bajar a una cueva mediante unas escaleras de madera que se localizan a un costado de un álamo, considerado como el vigía de la entrada; el gran tamaño de lugar deja impresionado a cualquiera, al igual que la tonalidad de su agua, sus espectaculares formaciones de piedra y, si se llega temprano, será testigo de uno de los espectáculos naturales más bellos de la región.
Algo que no se puede dejar pasar es la visita a Eknakán; su iglesia de San José de Eknakán forma parte de las 5 edificaciones de estilo neogótico que existen en Yucatán; además de ser el hogar del cenote Paraíso Papakal, un tesoro escondido dentro de la naturaleza, donde se puede realizar nado libre nocturno y contemplar la belleza de su agua cristalina, mientras se disfruta observar las increíbles estalactitas, estalagmitas y estalagnatos que se han formado durante el paso de los años.
El cenote Sambulá, le sorprenderá; una hermosa formación subterránea, donde una abertura en el suelo marca la entrada al este. Se deberá descender por sus escaleras que dirigen directamente a sus aguas poco profundas, que en época de calor la parte más profunda llega a medir 1.60 metros, mientras que en época de lluvias, la profundidad aumenta a 2 metros, perfecto para aquellos que viajan en familia.
Otra de las actividades por disfrutar es el recorrido en bicicleta desde este cenote hasta el pueblo, el cual se encuentra a menos de 1 km, y al ser pequeño, se puede visitar en un recorrido rápido.
Y a tan solo 45 minutos de la ciudad de Mérida, que destaca por sus bellas casonas, vasta oferta cultural y gastronómica; se encuentra un increíble cenote dentro de una antigua hacienda henequenera en ruinas, se trata de San Antonio, un cuerpo de agua que funcionaba como noria de la antigua ex-Hacienda.
Para conocer más sobre las historias que rodean este cenote, lo podrás hacer a través de uno de los recorridos que ahí se ofrecen. Un guía relata acontecimientos más relevantes de la ex hacienda, así como los cuentos sobre la cripta bautismal que ahí se encuentra y otros más acerca del árbol sagrado de los mayas.