La empresa Patagonia (dedicada a indumentaria para actividades al aire libre) está a dos años de
convertirse en una empresa cero emisiones de carbono, veinticinco años antes de lo establecido
en el Acuerdo de París.
Este tratado internacional firmado por 194 países, que busca evitar que el incremento de la
temperatura media global del planeta supere los 2ºC respecto a los niveles preindustriales y,
además, promover esfuerzos adicionales que hagan posible que el calentamiento global no
supere los 1,5ºC, ha establecido estos objetivos para a más tardar el año 2050.
Inscritas en esta meta, han surgido distintas campañas como Race to Zero, la alianza más grande
de la historia que moviliza una coalición de iniciativas líderes de cero emisiones netas, que
representan a 11,309 actores no estatales, incluidas 8,307 empresas, 595 instituciones
financieras, 1,136 ciudades, 52 estados y regiones, 1,125 instituciones educativas y 65
instituciones de salud (a septiembre de 2022). Estos actores de la 'economía real' se unen para
lograr cero emisiones netas de carbono también a más tardar el 2050.
Patagonia, fundada por Yvon Chouinard en la década de 1970 en las montañas, no se toma a la
ligera la crisis climática y quiere adelantarse. “Usaremos todo el poder y la influencia que
tengamos para enfrentar al cambio climático con cambios sistémicos”, señalan los directivos.
La acción más contundente fue sin duda la ejecutada por Chouinard en el 2022, cuando a sus 83
años de edad decidió donar su empresa para luchar contra la crisis ambiental y todas las
ganancias, 100 millones de dólares al año, se utilizarán para combatir el cambio climático y
proteger las tierras no desarrolladas a nivel mundial.
“Así es como funciona: el 100% de las acciones con derecho a voto de la empresa se transferirán
al Patagonia Purpose Trust, creado para proteger los valores de la empresa; y el 100% de las
acciones sin derecho a voto se entregarán a Holdfast Collective, una organización sin fines de
lucro dedicada a combatir la crisis ambiental y defender la naturaleza. El financiamiento vendrá
de la Patagonia: cada año, el dinero que ganamos después de reinvertir en el negocio se
distribuirá como dividendo para ayudar a combatir la crisis”, indicó Yvonn Chouinard.
Partiendo del hecho de que la industria de la confección, la segunda más contaminante, es
responsable de un enorme 10% de las emisiones globales de carbón, las estrategias y políticas
que implementa Patagonia continúan fortaleciéndose en todos los niveles de la empresa,
buscando convertirse en carbono neutral para 2025, mucho antes que la gran mayoría de las
empresas a nivel global.
Además de exigir cambios sistémicos por parte de los gobiernos y las industrias, ¿cuáles son sus
acciones a nivel interno? La empresa se ha comprometido a reducir radicalmente las emisiones
de carbono; duplicar su trabajo con las comunidades para que puedan alejarse gradualmente del
uso de combustibles fósiles, usar energías limpias y proteger la naturaleza, que es la solución
climática original.
Dentro de estos objetivos, también se ha propuesto sacar al petróleo de su ropa –no más fibras de
petróleo virgen para 2025- y sólo usará materiales como el algodón orgánico y orgánico
regenerativo, cáñamo, poliéster reciclado y nylon reciclado; que actualmente representan el 87%.
Continuar con su programa de reparación de ropa Worn Wear, que ofrece a los clientes prendas
de vestir con un 60% menos de emisiones que las nuevas.
A través de las métricas de EP&L (Environmental Profit & Loss account), Patagonia calcula el
costo en carbono, agua y desechos de cada producto que llega hasta sus tiendas, lo que le permite
identificar y priorizar mejoras significativas. Así mismo, busca contar con un 100% de energías
limpias en sus locales y oficinas a lo largo de Norte América en un comienzo, pero aspirando a la
cadena de suministro de Patagonia global, que es de donde viene más del 90% de sus emisiones
de carbono.
Pero reducir o incluso eliminar sus emisiones no es suficiente y considera que ha de apostar por
empujar y presionar a distintas esferas— negocios, gobiernos e individuos — para crear cambios
reales. “Tenemos la responsabilidad de actuar porque nuestro negocio y nuestra comunidad se
ven afectados por esta crisis y porque cada parte de nuestro negocio contribuye a la crisis
climática”, afirma Patagonia.