En el marco del Día del Niño y la Niña recordamos la importancia de reforzar estrategias orientadas a lograr aprendizajes fundamentales, que incentiven a la infancia desde los primeros años de la primaria para que desarrollen su máximo potencial a fin de tener una vida plena, íntegra, participativa e igualitaria.
En cada etapa de la niñez se adquieren y desarrollan diferentes habilidades tanto dentro como fuera de las aulas. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), el periodo entre los seis y ocho años, cuando suelen cursar de primero a tercer grado de primaria, se caracteriza por el desarrollo significativo de su cerebro, pues poseen el dinamismo y la creatividad para fortalecer su intelecto, la capacidad de razonar y realizar procesos lógicos, y sus ideas se basan en experiencias tangibles y hechos concretos.
Es un momento en el que muestran mayor independencia y preocupación por el futuro. Además, se expresan con mayor claridad y esto, a su vez, les permite establecer relaciones fuera del círculo familiar; de ese modo, también dejan de centrarse en ellos mismos y prestan mayor atención a lo que ocurre en su entorno.
Sin embargo, para que estas habilidades se desarrollen y afiancen adecuadamente, influyen tres factores principales, de acuerdo con datos difundidos por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO): neurociencia, economía y ciencias de la educación.
Ante este escenario, el Instituto Natura en México puso en marcha, desde su inicio de operaciones en nuestro país hace dos años, alianzas con distintas Secretarías de Educación para implementar políticas de aprendizajes fundamentales que buscan mejorar y garantizar la calidad educativa enfocada en los primeros tres grados de primaria.
De esta manera, se busca que los estudiantes adquieran conocimientos esenciales en lengua, matemáticas y habilidades socioemocionales, lo cual favorecerá su desarrollo para lograr mejores oportunidades. A su vez, se busca que estos conocimientos les permitan reconocer su responsabilidad como agentes de transformación social y, comprometerse a mejorar el medio del que forman parte para desarrollar una sociedad más justa y próspera con oportunidades para todas las personas.
Desde el ciclo escolar 2022-2023 se han beneficiado a más de 120 mil estudiantes que actualmente cursan la primaria baja en más de 700 escuelas públicas de dichas entidades, donde ahora la niñez y su educación son las protagonistas de todos los días.
En alianza con la UNESCO, Fundación Zorro Rojo y Vía Educación, así como con la participación de diversos especialistas implementadores, Instituto Natura estableció un equipo para trabajar en los estados con los cuales firmó convenios de colaboración en materia educativa, tales como Guanajuato, Nuevo León, Querétaro, Tamaulipas, Veracruz y Yucatán.
Para el próximo ciclo escolar, el Instituto impulsará la ampliación de la política para alcanzar a cerca de medio millón de estudiantes haciendo equipo con más de 22 mil docentes.