Es necesario colocar en el debate público la centralidad de la transparencia para la democracia y la utilidad que tiene para la ciudadanía el acceso a la información como un derecho llave para acceder a más derechos, como la salud y la educación, consideró Blanca Lilia Ibarra Cadena, comisionada presidenta del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).
Comentó los retos que tiene, actualmente, el INAI en las materias de derecho a la información, transparencia, protección de datos personales, los archivos y la defensa de su autonomía.
Puntualizó que “por un lado, no se ha posicionado en el debate público la centralidad de la transparencia para la democracia; se ha insistido en que ésta es una suerte de aditamento, de agregado que la fortalece, pero no es un elemento indisociable de la misma, es decir, como un componente que la hace posible.
Aunque la transparencia no se desarrolló como concepto, sino hasta las últimas décadas, lo cierto es que ha estado presente como telón de fondo del reclamo democrático y, bajo esas líneas argumentativas, en distintos espacios se ha planteado que ni la democracia procedimental, ni la democracia sustantiva, son posibles sin transparencia”.
Ibarra Cadena también se refirió a la necesidad de ampliar la socialización del derecho de acceso a la información a más núcleos de la población, para que éstos lo ocupen de manera cotidiana, como una herramienta para el ejercicio de más derechos.
De igual forma, comentó que el INAI puede ser útil para ejercer el derecho a la explicación que tiene toda la población respecto a las razones para implementar determinadas políticas públicas, así como el derecho a la deliberación de lo que ocurre en la vida pública nacional.
En su exposición, enlistó algunos de los retos principales que afronta la institución que encabeza; en materia de datos personales, dijo que se requiere identificar el impacto negativo de las nuevas tecnologías en la protección de datos personales, y contrarrestarlo mediante legislaciones, regulaciones y políticas pertinentes; propiciar la cooperación internacional para el tratamiento de datos transfronterizos, así como para la investigación y apoyo procesal.
En cuanto al acceso a la información, mencionó que entre los retos destacan: dotar al INAI de capacidades sancionatorias, reforzar las medidas de apremio y mejorar el cumplimiento de las determinaciones; además, aumentar la calidad de las respuestas, mitigar las estrategias de negativa de los sujetos obligados, y consolidar la socialización del derecho de acceso a la información, concentrando los esfuerzos en su aprovechamiento.