La farmacéutica Moderna anunció que los datos de los ensayos clínicos de investigación confirman que su vacuna COVID-19 actualizada, pendiente de aprobación por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos, para la temporada de vacunación de otoño de 2023, genera un incremento de 8.7 veces en anticuerpos neutralizantes en humanos contra BA.2.86 (Pirola), una variante bajo vigilancia.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) indican que la variante BA.2.86 con alta mutación puede ser más capaz de causar infección en personas que previamente tuvieron COVID-19 o fueron vacunadas con dosis anteriores, señalando que las vacunas COVID-19 actualizadas pueden ser eficaces para reducir la enfermedad grave y la hospitalización.
“Estos resultados demuestran que nuestra vacuna COVID-19 actualizada genera una fuerte respuesta humana inmunitaria contra la variante BA.2.86 que presenta una alta mutación. Junto con los datos comunicados anteriormente, que demuestran una respuesta igualmente eficaz frente a las variantes EG.5 y FL.1.5.1, se confirma que nuestra vacuna COVID-19 actualizada seguirá siendo una importante herramienta de protección de cara a la temporada de vacunación de otoño”, afirmó el Dr. Stephen Hoge, Presidente de Moderna. “Moderna seguirá evaluando rápidamente las amenazas para la salud pública mundial y se compromete a aprovechar nuestra plataforma de ARNm contra el COVID-19”.
Las autoridades de salud pública están vigilando atentamente la variante BA.2.86, una cepa de COVID-19 con un alto grado de mutación, con más de 30 modificaciones en comparación con las cepas Ómicron anteriores, y algunos gobiernos están acelerando las campañas de vacunación contra COVID-19 debido a su potencial para romper la inmunidad protectora generada por la vacunación o infección previa con COVID-19. La aparición de BA.2.86, además de la creciente prevalencia de las variantes EG.5 y FL1.5.1, subraya la necesidad de la inmunización con una vacuna COVID-19 actualizada, que puede ayudar a reducir la enfermedad grave y las hospitalizaciones causadas por las cepas que circulan actualmente.
Los datos de los ensayos clínicos de Moderna sobre la eficacia de la vacuna COVID-19 actualizada contra la variante BA.2.86 se han comunicado a las autoridades regulatorias y se han presentado para su publicación.
En poco más de 10 años desde su fundación, Moderna ha experimentado una transformación desde ser una empresa en etapa de investigación que avanzaba en programas en el campo del ARN mensajero (ARNm), hasta convertirse en una empresa con un portafolio clínico diverso de vacunas y tratamientos en siete modalidades, un amplio portafolio de propiedad intelectual e instalaciones de fabricación integradas que permiten una producción clínica y comercial rápida a gran escala.
Moderna mantiene alianzas con una amplia gama de colaboradores gubernamentales y comerciales nacionales e internacionales, lo que ha permitido la búsqueda tanto de ciencia innovadora como de una rápida expansión de la producción. Más recientemente, las capacidades de Moderna se han unido para permitir el uso y la aprobación autorizados de una de las primeras y más efectivas vacunas contra la pandemia de COVID-19.