Ante un complejo panorama de ineficiencia energética potencializada por la Federación y con una realidad de nearshoring, es urgente que la futura administración nacional coadyuve a las empresas y gobiernos locales para que no sigan ralentizándose las inversiones por falta de energía, declaró Miguel Ángel Mateo Simón, socio del despacho Hogan Lovells.
Los estados trabajan a favor de mayor acceso a energía, pero no pueden actuar con mucha libertad, pues es un ámbito de injerencia federal. Así que deben fomentar una inversión estatal y federal. “Muchas veces se topan con pared al dialogar con la Federación. El nearshoring se dañara por falta de energía y la falta de acceso a redes como de energía renovable”, dijo.
Se debe tener nuevas políticas de autoabasto energético; ya existe el concepto en la ley vigente, pero es limitado. Igualmente, la política empresarial debe adoptar nuevos roles en temas energéticos como de combustibles, gas natural y renovables.
La seguridad energética no es tener más plantas de CFE, o seguir con posturas que cancelaron las líneas de alta tensión en Baja California y Oaxaca, sino que la política industrial debe modificarse con el nuevo sexenio que debe abrir las puertas a las inversiones privadas en este ámbito.
“No existe una política energética en este sexenio que tiene una vocación industrial pero no energética; sector que debe transitar a mercado de carbono, mitigación climática, sector renovable, inversiones privadas, etc. En el tema de electromovilidad, son los privados, quienes crecen en este rubro y no el gobierno federal”.
En México, desde 2019 se tienen cambios de paradigmas por los cambios legislativos que jugaron a tener un mercado abierto en electricidad que es dominado por Comisión Federal de Electricidad (CFE), comentó.
Cabe mencionar que las candidatas presidenciales visualizan modificaciones en temas de energía, indicó que, el caso de Claudia Sheinbaum es más abierta al diálogo con empresas que su predecesor. No olvidar que es una realidad que no existen inversiones en redes de transmisión que afecta a los parques industriales del país.
En una visión general con un Congreso con mayorías para Morena en el último mes de López Obrador, explicó que se presentaría una reforma energética que desaparecería a organismos energéticos y daría todo el poder a Secretaría de Energía y la CFE.
Detalló que la candidata Xóchitl Gálvez, se ha reunido con las industrias, agregó que, la 4T apostó todo a Petróleos Mexicanos (Pemex) y se perdió perspectiva económica de las rondas petroleras por ideología. En gas natural, se tienen grandes oportunidades al no instalar los gasoductos.
Por su parte, Guillermo González Frankerberger, socio del despacho Hogan Lovells, declaró que sin energía el nearshoring se afectará sin energía y se dañaron los 40 mil millones de dólares de inversión. Sin embargo, la franja fronteriza en sus industrias maquiladoras llevan 5 meses a la baja en contrataciones y la llegada de industrias se comienza a ralentizar.
El nearshoring llegará conforme lo permita la infraestructura y el problema de las ciudades industriales como es Querétaro, Estado de México, Tijuana, Puebla, Aguascalientes, CD. Juárez, que urge tengan más espacios disponibles que van construyendo conforme llegan las marcas y los dineros se detengan más de un año.
Pero, se sabe de que existen industrias que por sus propios medios soluciona los temas de energía y agua. Aspecto que no ha tenido aportación del gobierno federal.
Acotó que las grandes mayoría de las inversiones del nearshoring se enfocan en el norte y bajío del país, pero se estima que la Península de Yucatán y el sureste crecer con nuevos proyectos de CFE.
Se habla que los estados con llegada de muchas empresas se espera que en unos 2 a 3 años se detonara la necesidad de más vivienda para las personas, que se habla que debe irse considerando por las autoridades estatales.