Con una interfaz y algunas aplicaciones similares a las que se encuentran en los dispositivos existentes de la marca, el Apple Vision Pro se presenta como una interfaz de realidad mixta que permite al usuario interactuar con el mundo real y virtual sin necesidad de ningún accesorio más que el movimiento de sus manos.
Al respecto, la empresa de ciberseguridad ESET advierte que al centrarse en la inmersión dentro del entorno virtual, el dispositivo esto puede traer una serie de riesgos en relación a la seguridad digital de quien lo utilice.
Los puntos más susceptibles a ataques maliciosos o fallos de sistema, según ESET, son el sistema operativo: a pesar de que su estructura principal se basa en el software existente de Apple, el dispositivo tendrá un sistema operativo (S.O.) completamente nuevo. Al estar hecho para diferentes tipos de interacciones con el entorno, puede presentar anomalías de comportamiento.
Entre las posibles anomalías el equipo de investigación de ESET son una apertura excesiva de ventanas: esto definitivamente haría que la experiencia del usuario fuera bastante desagradable y podría resultar en un ocultamiento de la vista del entorno.
Sobrecarga: si una o más aplicaciones presentes en el S.O. provocan una sobrecarga del sistema, esto puede provocar la congelación de la interfaz.
Cambio en sensores y cámaras: una de las características del Apple Vision Pro es que cuenta con dos pantallas, que permiten reproducir imágenes y vídeos en muy alta resolución, pero también significa que el usuario no ve directamente el mundo que le rodea; todo pasa a través de las cámaras y los sensores.
Vulnerabilidades: ya sea por características provenientes del sistema operativo o por algún eventual descuido en la composición de las aplicaciones que se instalarán en Apple Vision, es posible que ciberdelincuentes exploten vulnerabilidades en los equipos.
La explotación de vulnerabilidades es uno de los trucos utilizados por los delincuentes para propagar amenazas como troyanos y ransomware. En el caso del ransomware, el dispositivo se verá inhibido de realizar plenamente sus funciones y las víctimas tendrán dos opciones: ponerse en contacto con Apple para obtener ayuda -ya que Vision no cuenta con una interfaz que permita la interacción directa con el sistema operativo para reinstalarlo-, o el pago del rescate.
En el caso de la infección con un troyano, los ciberdelincuentes pueden tener acceso a todas las cámaras y sensores disponibles en el dispositivo, viendo y monitorizando todo lo que ve la víctima. Sería como tener a un delincuente al lado durante mientras se utiliza el dispositivo, sin privacidad.
Exposición involuntaria de contenido sensible: en un entorno controlado, la cantidad de información sensible perteneciente al usuario tiende a aumentar significativamente, como símbolos religiosos, elementos que demuestren preferencia sexual, afiliación política, estado de salud e incluso momentos íntimos o personales del usuario o personas cercanas a él, entre muchos otros.
Por lo que cuando el uso del dispositivo se realiza en un lugar público, otras personas tienden a estar más expuestas al análisis de imágenes, analizando sus rostros y detalles de su ropa. A esto se le suma la correlación entre el mapeo tridimensional de un entorno y las personas que lo rodean, vinculadas a información sobre el momento exacto y el momento en que están allí.