En el mundo actual, la importancia de los criterios ESG (Ambiental, Social y de Gobernanza) está impulsando una transformación profunda en las organizaciones, donde el desempeño y el éxito a largo plazo de una marca están directamente vinculados a su enfoque en estos principios. Los consumidores, cada vez más exigentes, demandan iniciativas sostenibles y responsables de las empresas, haciendo que la sostenibilidad no sea solo una opción, sino una métrica esencial de éxito en todos los sectores, especialmente en la industria tecnológica.
En este contexto, la adopción de la computación en la nube destaca no solo por sus beneficios económicos y operativos, sino también por su contribución a la sostenibilidad. Sin embargo, la transformación hacia la sostenibilidad no es responsabilidad exclusiva de las empresas. Cada individuo puede desempeñar un papel crucial en la búsqueda de soluciones para la crisis climática. Es importante comprender la crisis climática y estar informado sobre sus causas e impactos. Además, reconocer el ámbito de influencia propio, ya sea personal, profesional o comunitario, y buscar oportunidades para participar y tomar acciones concretas son esenciales.
En Akamai Technologies, por ejemplo, el compromiso con la sostenibilidad se lleva a cabo a través de diversas iniciativas. Mediante asociaciones educativas con proveedores clave en la cadena de suministro para promover la transición a la energía limpia y proporcionando datos transparentes y confiables para que los clientes puedan medir sus emisiones de carbono utilizando la plataforma. Para impulsar aún más el cambio, se ha creado un equipo verde global compuesto por empleados comprometidos con la organización, la comunidad y la promoción de acciones colectivas para abordar los desafíos climáticos.
«Con estas medidas, adoptamos un enfoque amplio y colaborativo donde no solo podemos impulsar la innovación y la eficiencia empresarial, sino también promover una transformación positiva hacia un futuro más sostenible e inclusivo para todas las personas usuarias de Internet», enfatiza Hugo Werner, Vicepresidente regional de Akamai para LATAM.
En medio de la creciente importancia de la migración corporativa a la nube, Akamai Technologies, una empresa líder en servicios en la nube que potencia y protege la vida en línea, resaltó los principales impactos ambientales y sostenibles de esta transición a la computación en la nube.
Eficiencia operativa y agilidad: La migración a la nube permite a las empresas reducir significativamente los costos operativos al eliminar gastos relacionados con la infraestructura física, el mantenimiento y las actualizaciones del servidor. «Al mismo tiempo, ofrece una mayor agilidad en la implementación de nuevos recursos y servicios, ya que los
recursos en la nube pueden aprovisionarse y escalarse rápidamente según las necesidades comerciales», explica Hugo Werner. Empresas como Netflix, por ejemplo, pueden manejar picos de demanda durante el lanzamiento de series o películas de manera mucho más eficiente debido a su infraestructura en la nube.
Cultura organizacional y trabajo remoto: La migración a la computación en la nube puede promover una cultura organizacional más flexible e inclusiva, facilitando el trabajo remoto y la colaboración entre equipos distribuidos geográficamente. «Las herramientas de comunicación y colaboración basadas en la nube, como Microsoft Teams o Slack, permiten a los empleados conectarse y trabajar juntos desde cualquier lugar del mundo, promoviendo la diversidad y la inclusión en el lugar de trabajo», agrega Hugo.
Innovación y transformación digital: Al liberar recursos de TI de las limitaciones físicas de la infraestructura local, las empresas pueden experimentar e implementar nuevas tecnologías y modelos de negocios de manera más rápida y eficiente. Por ejemplo, empresas como Airbnb pueden lanzar nuevas funciones y mejoras en su plataforma con más frecuencia debido a su infraestructura en la nube altamente escalable y automatizada.
Responsabilidad social y ambiental: Al consolidar servidores e infraestructura en centros de datos altamente eficientes, las empresas pueden reducir drásticamente su consumo de energía y sus emisiones de carbono. Además, muchos proveedores de servicios en la nube están invirtiendo en energía renovable y adoptando prácticas sostenibles en sus operaciones. Por ejemplo, Microsoft se ha comprometido a convertirse en carbono negativo para 2030, impulsando la adopción de energía renovable en sus operaciones y cadena de suministro.
Contribución más allá de los resultados financieros: Además de los beneficios financieros directos, esta migración puede contribuir de diversas maneras al éxito y la resiliencia de las empresas. Esto incluye mejorar la experiencia del cliente, mejorar la seguridad de la información y el cumplimiento normativo, así como la capacidad de adaptarse rápidamente a los cambios en el mercado y la demanda del consumidor. Por ejemplo, empresas como Zoom pudieron manejar de manera efectiva el aumento exponencial en la demanda de videoconferencias durante la pandemia debido a su infraestructura en la nube altamente escalable y resiliente.
En general, la migración a la computación en la nube no es solo una cuestión de tecnología, sino una oportunidad para que las empresas re-imaginen y transformen sus negocios de manera integral. «Al adoptar un enfoque estratégico e integrado hacia la nube, las empresas no solo pueden mejorar su eficiencia y competitividad, sino también promover una cultura organizacional más inclusiva, impulsar la innovación y contribuir positivamente al medio ambiente y la sociedad en su conjunto», concluye Werner.