El Estudio de identidad en línea de Jumio 2024, examinó las opiniones de consumidores adultos de Reino Unido, Estados Unidos, Singapur y México. Los resultados sugieren que nueve de cada 10 consumidores mexicanos (89 por ciento) se preocupan diariamente de ser engañados por un deepfake para entregar información sensible o dinero, comparado con el 72 por ciento en general.
Sólo el 15 por ciento de los consumidores globales afirma que nunca se ha encontrado con un vídeo, audio o imagen falsificada, mientras que el 60 por ciento ha estado expuesto a una deepfake en el último año.
A pesar de la gran ansiedad que genera esta tecnología cada vez más prevalente y en constante evolución, los consumidores siguen sobrevalorando su propia capacidad para detectar deepfakes: el 60 por ciento cree que podría detectar una deepfake, frente al 52 por ciento en 2023.
Los hombres se muestran más confiados en su capacidad para detectar una deepfake (66 por ciento de hombres frente al 55 por ciento de mujeres), siendo los hombres de entre 18 y 34 años los que muestran más confianza (75 por ciento), mientras que las mujeres de entre 35 y 54 años son las menos seguras (52 por ciento).
Una mayoría significativa (60 por ciento) de los consumidores pide una mayor regulación gubernamental de la IA para abordar estos problemas. Sin embargo, la confianza en la regulación varía de un país a otro: el 69 por ciento de los consumidores de Singapur confía en la capacidad de su gobierno para regular la IA, frente al 26 por ciento del Reino Unido, el 31 por ciento de Estados Unidos y el 44 por ciento de México.
El fraude es un problema demasiado conocido para muchos consumidores de todo el mundo, ya que el 68 por ciento de los encuestados afirma saber o sospechar que ha sido víctima de fraude en línea o usurpación de identidad, o que conoce a alguien que lo ha sido. Casi la mitad de los encuestados mexicanos (47 por ciento) conoce a alguien que ha sido víctima de fraude en línea o robo de identidad, mientras que el 31 por ciento reportó saber o sospechar que ellos mismos han sido víctimas.
Mientras que casi la mitad (43 por ciento) de los consumidores mexicanos que fueron o sospecharon que fueron víctimas de fraude en línea o robo de identidad dijeron que la experiencia fue un inconveniente menor, el 33 por ciento dijo que causó problemas significativos y varias horas de trabajo administrativo para resolverlo, y el 19 por ciento llegó a calificarlo como una experiencia traumática. Casi un tercio (30 por ciento) declaró haber perdido entre 2,100 y 10,500 pesos, mientras que el 27 por ciento declaró haber perdido menos de 2,100 pesos.
Independientemente de si han sido víctimas de un fraude o de un robo de identidad, la mayoría de los consumidores mexicanos se preocupan diariamente por ser víctimas de filtraciones de datos (91 por ciento) y de ataques de robos de cuentas (91 por ciento).
La verificación de la identidad es una parte clave de la solución para las empresas que buscan protegerse y garantizar que sus usuarios son auténticos. Más del 70 por ciento de los consumidores globales afirmó que dedicaría más tiempo a la verificación de la identidad si estas medidas mejoraran la seguridad en sectores como: servicios financieros (77 por ciento), salud (74 por ciento), administración pública (72 por ciento), ecommerce y retail (72 por ciento), redes sociales (71 por ciento), economía colaborativa (71 por ciento) y viajes y hostelería (71 por ciento).
A la hora de crear una nueva cuenta en internet, los consumidores de todo el mundo afirmaron que tomar una foto de su DNI y una selfie en el momento sería la forma más precisa de verificar la identidad (21 por ciento), mientras que la creación de una contraseña segura se sitúa en segundo lugar (19 por ciento).