Una de las claves para un gobierno mejorado se encuentra en la capacitación en Inteligencia Artificial (IA) para sus empleados, lo que permitirá mejorar la administración pública y los servicios a los ciudadanos. Según datos recientes, más del 54 por ciento de la población mundial cree que esta herramienta beneficiará a las personas como ellos, reflejando un optimismo global sobre esta tecnología.
En los últimos años, la conversación sobre la IA ha cambiado significativamente a medida que las personas tienen experiencias de primera mano con aplicaciones IA, escuchan sobre ellas en las noticias y discuten sobre su futuro.
Para comprender mejor el sentimiento global en torno a la AI, Google e Ipsos llevaron a cabo una encuesta global sobre IA en 17 países, lo que dio como resultado el informe titulado «Nuestra vida con la IA».
La tecnología tiene el potencial de impulsar las economías y mejorar la productividad y la actividad económica para el beneficio de todos. Según este informe, el 42 por ciento de las personas considera que la IA es crucial para aumentar la seguridad, solo superada por los avances médicos, que son valorados por un 45 por ciento. Además, casi la mitad de los encuestados (47 por ciento) cree que la IA ayudará a los grupos subrepresentados, promoviendo un mundo más equitativo.
Un 78 por ciento de las personas están de acuerdo en que el gobierno y las empresas tecnológicas deben trabajar juntos para supervisar el desarrollo de la IA. Esto sugiere un amplio apoyo para que los gobiernos adopten y la utilicen de manera efectiva.
Al respecto, Franco Palacios, CEO de la startuo Creai, comenta que “la colaboración entre el gobierno y el sector privado es crucial para asegurar que la IA se desarrolle de manera responsable y beneficiosa para todos”.
Para enfrentar los desafíos que trae la IA, es esencial que la industria, la sociedad civil y los formuladores de políticas colaboren estrechamente para preparar a la fuerza laboral para los cambios que vendrán.
La IA permite a las organizaciones gubernamentales lograr más con presupuestos ajustados, automatizar tareas tediosas, mejorar capacidades críticas y lograr avances significativos en investigación. Por ejemplo, tecnologías como el reconocimiento facial en vías públicas, identificadores de disparos de armas, y drones que siguen a presuntos criminales son solo algunas de las aplicaciones que pueden mejorar la seguridad y la eficiencia.
Sin embargo, México se encuentra en una situación de fragilidad en su desarrollo debido al desconocimiento, la falta de regulación y la escasa inversión en el sector. Esto no solo genera abusos que afectan los derechos humanos de los usuarios, sino que también impide el crecimiento de empresas dedicadas a esta actividad.
Para mitigar estos riesgos y maximizar las oportunidades, es crucial que los gobiernos se enfoquen en la educación y el desarrollo de habilidades en esta tecnología para sus empleados. Esto implica expandir programas de capacitación a diferentes comunidades y apoyar a los trabajadores afectados, ayudándolos a adquirir nuevas habilidades y encontrar empleos más adecuados rápidamente.
El experto dijo que la capacitación en IA no solo mejorará la administración pública y los servicios a los ciudadanos, sino que también contribuirá a construir un futuro más seguro, justo y eficiente.
Al adoptar estas tecnologías, los gobiernos pueden asegurarse de que la AI trabaje en beneficio de toda la sociedad, promoviendo la productividad económica y resolviendo grandes desafíos sociales.
A medida que los gobiernos continúan adoptando estas tecnologías, es vital que inviertan en la formación de sus empleados, asegurando así que la IA se utilice de manera responsable y efectiva para el bien de todos.
Algunos beneficios de la capacitación en AI para los gobiernos son la mejora de servicios públicos: está optimiza la entrega de servicios públicos, haciéndolos más eficientes y accesibles para todos los ciudadanos. Por ejemplo, puede ayudar a gestionar infraestructuras complejas, como el mantenimiento de las redes de alcantarillado o la administración de flotas de transporte público.
Establecer seguridad y ciberseguridad: al utilizar IA, los gobiernos pueden fortalecer la seguridad nacional y la ciberseguridad, respondiendo a una de las principales preocupaciones del público. Puede ser utilizada para el reconocimiento facial, la detección de armas y el seguimiento de vehículos, mejorando así la seguridad pública.
Mejorar en la equidad y justicia: puede ayudar a identificar y apoyar a los grupos subrepresentados, construyendo una sociedad más equitativa. Herramientas de AI pueden ser implementadas para asegurar que los servicios lleguen a las comunidades que más lo necesitan.
Establecer una mejor colaboración público-privada: la formación en ella facilita la colaboración entre el gobierno y las empresas tecnológicas, asegurando un desarrollo responsable y beneficioso de esta tecnología.