Esta semana se está celebrando el Día de la analfabetización, en donde la ONU lo celebra dos días con la intención concientizar sobre la importancia de ésta ya que es la base para adquirir conocimientos, habilidades, valores, actitudes y comportamientos más amplios que fomenten una cultura de paz y la no discriminación.
La analfabetización impacta a un país en múltiples dimensiones. En primer lugar, limita el acceso a la educación y al conocimiento, lo que a su vez afecta el desarrollo personal y profesional de los individuos. Esto crea una brecha en la capacidad de la población para participar en la economía, resultando en menores oportunidades laborales y un aumento de la pobreza.
De acuerdo al censo realizado por INEGI en 2020 (el último), durante los últimos 50 años, el porcentaje de personas analfabetas de 15 y más años bajó de 25.8 % en 1970 a 4.7 % en 2020, lo que equivale a 4,456,431 personas que no saben leer ni escribir.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), los cinco estados con mayor población analfabeta son Chiapas, con 13.68 por ciento; Guerrero, 11.81 por ciento; Oaxaca, 12.45 por ciento; Veracruz, 4.43 por ciento, y Michoacán, con 3.75 por ciento.
- Desigualdad Socioeconómica: La falta de habilidades de lectura y escritura limita las oportunidades laborales de muchas personas, perpetuando la pobreza y la desigualdad. Las personas analfabetas a menudo tienen acceso restringido a empleos bien remunerados, lo que exacerba las diferencias económicas.
- Acceso a la Educación: La analfabetización puede ser tanto causa como consecuencia de un acceso limitado a la educación. Las comunidades con altas tasas de analfabetismo suelen tener menos recursos educativos, lo que dificulta el desarrollo de una cultura de aprendizaje y mejora continua.
- Participación Cívica: Las personas que no pueden leer o escribir pueden tener dificultades para comprender sus derechos y responsabilidades, lo que afecta su participación en procesos democráticos. Esto puede resultar en una menor implicación en la vida política y social del país.
- Salud y Bienestar: La analfabetización también afecta la salud pública. Las personas que no pueden leer etiquetas de medicamentos, instrucciones de salud o información sobre prevención de enfermedades son más vulnerables a problemas de salud y menos propensas a buscar atención médica adecuada.
- Desarrollo Cultural: La falta de alfabetización limita el acceso a la literatura, el arte y otros recursos culturales, afectando la apreciación y el desarrollo cultural de la sociedad.
- Crecimiento Económico: Un bajo nivel de alfabetización puede impactar negativamente en la productividad y la innovación, lo que a su vez afecta el crecimiento económico del país. Las empresas requieren trabajadores calificados y educados para prosperar, y la analfabetización puede ser un obstáculo en este sentido.
En conjunto, la analfabetización en México representa un desafío significativo que requiere atención y esfuerzos concertados para mejorar el acceso a la educación y fomentar la alfabetización en todas las comunidades.
Es indispensable que la educación en nuestro país tenga propuestas concretas, así como presupuesto para trabajar el tema, pues en 2023 el presupuesto público funcional destinado a la educación cayó a su nivel más bajo en una década. Los recursos destinados a la educación equivalen a apenas 3% del PIB nacional.