José Amadeo Hernández Barajas, presidente de la Central Campesina Independiente (CCI), denunció que el gobierno federal, a través de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), tiene grandes pendientes por atender como son los conflictos agrarios, de los cuales, el estado de Querétaro no presenta ninguno.
Querétaro tiene 369 núcleos agrarios, lo que representa el 4.07 por ciento del total de núcleos agrarios en el estado. Cabe mencionar que el 50 por ciento de los núcleos agrarios de Querétaro se encuentran en la zona conurbada.
Algunos núcleos agrarios en Querétaro tienen problemas como rechazo a programas, conflictos de límites, o dotación conurbada con el municipio de Querétaro, sin embargo, no se considera como un formal problema agrario.
Señaló que el gobierno federal olvido asignar presupuesto en 2025 para solucionar más de 500 conflictos agrarios que afectan a 352 núcleos agrarios, siendo 80 de gran relevancia por su impacto social y medio ambiental por lo que se corre el riesgo de que se conviertan en focos rojos. Lamentó que la Sedatu se concentra en la construcción de vivienda y es “promotora inmobiliaria.
Relató que los principales conflictos agrarios se presentan en Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Veracruz. El líder nacional con esta problemática es Oaxaca que mantiene 23 conflictos de alto riesgo en el estado.
El conflicto de límites estatales entre Oaxaca y Chiapas ha sido utilizado para provocar 25 años de enfrentamientos violentos, entre comuneros indígenas de Chimalapas, con ejidatarios indígenas chiapanecos, que habitan 30 núcleos agrarios y que han sido trasladados a esa zona durante varios sexenios.
Otro conflicto significativo se presenta en Veracruz, en Xalapa y Emiliano Zapata, así como Veracruz y La Antigua. Mientras que en Guerrero persisten 51 conflictos agrarios y 14 son considerados de alto riesgo.
Detalló que “de nada sirve que la SEDATU se encuentre entre las dependencias con mayor incremento presupuestal de 183 por ciento para 2025 y el Programa de Vivienda Social tendrá 32,000 millones de pesos, lo que representa 84.1 por ciento del presupuesto total y deja en el olvido a los núcleos agrarios”
Por lo anterior, aseguró que “urge una Nueva Política Agraria en la que el Estado retome su conducción, rectoría y de solución a los conflictos agrarios ya que al no ser atendidos terminan en enfrentamientos entre los pobladores”.