En un mundo donde el consumo masivo sigue creciendo, el diseño de productos innovadores y sostenibles se ha convertido en una prioridad para las empresas. A nivel global, se estima que se generan aproximadamente 2.300 millones de toneladas de residuos sólidos urbanos anualmente, y este número podría aumentar a 3.400 millones de toneladas para el año 2050, según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) En este contexto, las empresas deben alinearse con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), adoptando prácticas que equilibren la innovación de productos con la sostenibilidad.
Un mercado de necesidades en constante cambio
De acuerdo con Elena González, colaboradora de ESDESIGN, perteneciente a Planeta Formación y Universidades “vivimos en la era de la información, en la que todo se sucede a gran velocidad. Incluidos, el número de artículos que tenemos a nuestro alcance, con características que cambian sin cesar. Y es que como sociedad, nos hemos habituado a tener necesidades nuevas con mucha frecuencia y de cara a poder satisfacerlas, las empresas deben apostar siempre por crear un producto innovador que lanzar al mercado”.
Con respecto a la cantidad de residuos generada por el consumo de productos, los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) indican que en el país la cantidad promedio diaria de residuos sólidos urbanos recolectados asciende a 106,523,139 kilogramos diarios. El 15% de las unidades económicas grandes cumplió, al menos, con una medida de protección ambiental; 56.6% no aplicó medida alguna y 27.5% dijo desconocer la obligatoriedad.
Teniendo en cuenta el panorama actual, los usuarios antes de crear cualquier producto, deben tener como un pilar fundamental, la sostenibilidad, así mismo, antes de cualquier desarrollo, González destaca la importancia de realizar un estudio de mercado exhaustivo, “aunque creamos que nuestra idea funcionará, necesitamos validar que realmente satisface una necesidad del mercado o que, de existir productos similares, el nuestro ofrezca algo nuevo y diferenciador.”
10 pasos hacia la innovación de productos sostenibles
Realizar un estudio de mercado: Identificar necesidades insatisfechas y tendencias sostenibles.
Identificar nichos de mercado: Explorar áreas poco explotadas para soluciones sostenibles.
Generar ideas creativas: Utilizar sesiones de brainstorming para desarrollar conceptos disruptivos.
Evaluar la viabilidad de las ideas: Analizar el impacto ambiental, los costos y la funcionalidad.
Definir el público objetivo: Adaptar el producto a consumidores conscientes de la sostenibilidad.
Estudiar la competencia: Identificar carencias en sus productos para destacarse con soluciones innovadoras.
Crear un modelo de negocio verde: Diseñar estrategias que minimicen el impacto ambiental en la producción y distribución.
Prototipar y probar: Realizar ajustes en los prototipos para garantizar su aceptación y sostenibilidad.
Planificar el marketing: Comunicar los beneficios sostenibles del producto para captar la atención de consumidores responsables.
Lanzar y mejorar: Monitorizar el feedback y realizar ajustes basados en las respuestas del mercado.
La clave para el éxito de los productos en 2025
González concluye “que la sostenibilidad no sólo es un compromiso ético, sino también una estrategia de mercado. Las empresas que liderarán en el futuro serán aquellas que combinen innovación y responsabilidad ambiental, respondiendo a las expectativas de consumidores más conscientes y a las demandas globales de sostenibilidad”.
El diseño de productos innovadores y sostenibles no es solo una tendencia; es una necesidad para transformar el consumo y preservar el medio ambiente. Con los pasos correctos y un enfoque comprometido, las empresas pueden no solo marcar la diferencia, sino también liderar el cambio hacia un futuro más responsable.