Existe un alto nivel de desinformación entono a los diferentes compuestos que conforman a las plantas de cannabis, así como sus efectos positivos y negativos, sin embargo, uno de los puntos más importantes para ayudar a fomentar el crecimiento de la industria de cannabis es promover información entorno a este tipo de compuestos, y sobre todo ayudar a que las personas conozcan como actúan este tipo de compuestos en nuestro organismo. Para poder entender el mecanismo de acción que tienen en nuestro organismo los diferentes compuestos químicos que conforman a las plantas de cannabis, mejor conocidos como cannabinoides, es necesario entender que el organismo humano cuenta con una serie de receptores o sitios específicos donde los cannabinoides se acoplan en nuestro organismo, y estos sitios o receptores los responsables de una gran variedad de acciones relacionadas con la regulación de nuestro metabolismo[1].

Además de reconocer que nuestro organismo cuenta con receptores especializados que se activan con los cannabinoides, es importante derribar la barrera de información y reconocer que existen cientos de cannabinoides que conforman a las plantas de cannabis, y aunque lo más reconocidos son el Cannabidiol (CBD) y Tetrahidrocannabinol (THC), existen muchos otros que también ha sido estudiados para conocer su potencial terapéutico, y que incluso algunos de ellos han logrado ser reconocidos por las autoridades de diversos países debido a sus amplias ventajas para el cuidado de la salud.

CBD y THC

Estos dos compuestos químicos son ampliamente reconocidos, el Cannabidiol o CBD debido a que es un compuesto que no tiene efectos psicotrópicos, además de contar con un amplio potencial terapéutico como coadyuvante en el tratamiento del dolor, así como anticonvulsivos, para el tratamiento de las náuseas[2], además de contar con diversas investigaciones en torno a sus ventajas como neuro protector y por su potencial en el tratamiento de lesiones traumáticas cerebrales[3]. Además de ser una sustancia que cuenta con una amplia evidencia científica por sus ventajas en el tratamiento de padecimientos neurodegenerativos como epilepsia, así como para el tratamiento del estrés y la ansiedad, además de ser un compuesto que ha sido retirado de las listas internacionales de sustancias prohibidas por organismos internacionales y reconocida legalmente en una gran cantidad de países

Por su parte el Tetrahidrocannabinol, es ampliamente conocido por ser el responsable de los efectos psicotrópicos que se atribuyen a las plantas de cannabis, particularmente a la marihuana, pese a ser un compuesto que por su capacidad psicotrópica está en las listas de sustancias controladas y son pocas las regulaciones que permiten su uso fuera de los fines farmacéuticos, tiene un amplio valor terapéutico, pues se ha demostrado que es un gran aliado en el tratamiento del dolor crónico, así como en el tratamiento de anorexia, aumentando el apetito y disminuyendo las náuseas de los pacientes, además de las grandes ventajas que ofrece en el tratamiento de la enfermedad de Parkinson[4], razón por la cual ha sido considerado como una sustancia que puede ser utilizada en México bajo estrictos protocolos médicos.

Otros cannabinoides

Además del CBD y THC, existen otros cannabinoides menos conocidos públicamente pero que también ofrecen una amplia gama de ventajas en el cuidado de la salud, y los cuales pueden encontrarse en diversos mercados, ya sea como productos farmacéuticos, así como suplementos alimenticios, algunos ejemplos de estos cannabinoides son el Cannabigerol o CBG, que fue descrito por primera vez en 1996. Este compuesto es considerado como el precursor de otros cannabinoides, ya que tanto el CBD como el THC se derivan de las formas ácidas de este cannabinoide, además de contar con una gran variedad de ventajas terapéuticas, ya que ayuda a disminuir la ansiedad y el estrés y no posee los efectos intoxicantes que se atribuyen al THC, además el CBG tiene un amplio potencial para ralentizar la progresión de tumores.

Por si esto fuera poco, el cannabigerol es uno de los compuestos responsables de los efectos de concentración y creatividad que se atribuyen a las plantas de cannabis, por lo que es un aliado ideal para ayudar a aquellas personas que se encuentran con dificultades para mantenerse atentas o creativas durante sus actividades diarias.

Otro de los compuestos menos conocidos es el cannabinol o CBN, que al igual que el CBG se encuentra en cantidades muy pequeñas dentro de las plantas de cannabis, sin embargo, se ha demostrado que este compuesto es el resultado de la degradación del THC, perdiendo su efecto psicotrópico y manteniendo otras ventajas como su efecto sedante, lo que lo convierte en un excelente aliado para ayudar a las personas que sufren problemas de sueño, además de ser un gran aliado para el tratamiento de glaucoma, ya que ayuda a disminuir la presión intraocular[5].

“En HempMeds buscamos que las personas obtengan los beneficios que ofrecen los diversos componentes del cannabis, y siempre hemos sido aliados de la ciencia para demostrar sus efectos terapéuticos, pero también queremos ser un aliado de las personas que buscan este tipo de productos. Esta es la razón por la que consideramos que las personas deben tomar decisiones informadas sobre la forma en que los diversos cannabinoides pueden ayudar a mejorar su salud” afirmó Raúl Elizalde, CEO de HempMeds.

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