De acuerdo con la asociación Infancia Libre de Abuso Sexual (ILAS), el riesgo de abuso sexual infantil aumenta 30 por ciento en los periodos vacacionales, situación que se deriva con la llegada de las vacaciones de Semana Santa y Pascua, miles de niñas y niños pasan más tiempo en casa, en reuniones familiares o bajo el cuidado de personas distintas a sus padres.
Sin embargo, este periodo, que debería estar lleno de descanso y diversión, también representa un momento de mayor vulnerabilidad para la infancia y que requiere ser atendido con prontitud y gran cuidado.
Por ello, se dieron a conocer varias sugerencias básicas para la seguridad sexual infantil en vacaciones, dirigidas a madres, padres, cuidadores y cualquier persona responsable del bienestar de niñas y niños.
No obligar a que los menores de edad a saludar con besos o abrazos. Enséñele que tienen derecho a decir “no” cuando algo les incomoda, incluso con personas cercanas.
Ponga atención a los cambios de conducta. Si hay irritabilidad, aislamiento, miedo a ciertos lugares o personas, se pide que escuche y valide el sentir de los menores de edad.
Se debe supervisar el uso de dispositivos electrónicos. Acompañarlos en el uso de redes sociales, videojuegos en línea y aplicaciones con chat.
Hablar claro sobre partes íntimas. Usar un lenguaje directo y amoroso. Enséñeles que nadie debe tocar su cuerpo sin permiso, así como establecer redes de confianza. Definir a qué personas adultas pueden acudir si se sienten incómodos o inseguros.