En México, las empresas de 10 empleados o menos juegan un papel importante en la economía, representan el 97 por ciento de la totalidad de corporaciones en el país y emplean al 72 por ciento de la fuerza laboral. Según el informe publicado hoy por Strive México, “Caminos hacia la resiliencia de las MYPES”, una de cada tres empresas en México es propiedad o está operada por una mujer, y aunque, están sobre – representadas entre las microempresas, son, al mismo tiempo, las menos digitalizadas.
De acuerdo al libro blanco de BFA Global sobre el panorama de las micro y pequeñas empresas en México, se encontró que la pandemia expuso que 86 por ciento de las pequeñas empresas fueron las más afectadas y solo 2 de 3 hizo un ajuste operativo a lo digital y solo 4 por ciento tuvo un apoyo financiero oficial o privado.
Aunque, de lo bueno es que el Covid-19 causó que un 30 por ciento de las pequeñas y micro empresas digitalizaran alguna parte de sus procesos, sin embargo, se ubican debajo de sus pares a las ubicadas en Brasil que alcanzó un 67 por ciento.
Mientras que el 57 por ciento de las micro empresas se determinó que no pueden sobrevivir más de un año con los dineros recabados en la pandemia y que padecen por la falta de accesos a los créditos financieros. En capacidades tienen menos que sus pares de otras naciones; sólo 1 de cada 5 microempresarios tiene plan en caso de robo; 1 de cada 3 solo separa sus ganancias del negocio a su hogar y sólo 1 de cada 3 se siente capaz de acercarse a un banco.
En el futuro se aprecia que es necesario una mayor coordinación para tener mayor impacto en los apoyos a las mipymes, pues no todo es apoyo en finanzas, se requiere de esquemas de asistencia completos para que se vuelvan empresas resilientes en todos sus rubros que la componen.
En las microempresas, el nivel de digitalización es muy bajo. Se ubican cuatro veces más rezagadas que las pequeñas empresas. Las necesidades de mayores apoyos se deben concentrar en los rubros de comercio al por menor, comidas y bebida así como artículos de consumo y belleza.
Por ello, se propone un acelerador de resiliencia y no sólo enfocarse en créditos financieros; construir un laboratorio-plataforma de resiliencia y fomentar el aprendizaje: construir herramientas de medición de la realidad de las mipymes.
Mauricio Schwartzmann, contra manager, del Global for Inclusive Growth, dijo que el 97 por ciento de las empresas en México son pymes, que suman más de 4.2 millones de unidades, en todos los giros laborales, por ello, el programa a su cargo busca apoyar a la digitalización de las micro empresas. Se tiene el objetivo de apoyar a 400 mil mipymes en 3 años.
El programa de asistencia a mipymes a cargo de dicha organización consta de unificar el trabajo de diversos sectores sociales en base a tres ejes como son las herramientas digitales, enfoque de género y crear comunidad más capacitada.
Se dio a conocer los resultados del estudio Strive México del Mastercard Center for Inclusive Growth, sobre la realidad de las micro, pequeñas y medianas empresas (pymes), sobre su realidad pospandemia.
Juan Navarrete, presidente de Desarrollo de Fundación Capital, mencionó que la pandemia provocó que se incrementará la comunicación digital de las mipymes, que se vieron obligados a comunicarse mejor. Mientras que en el segundo año de la pandemia permitió el análisis de diversos aspectos como es la proveeduría y contactos digitales.
Aunque, aceptó que la comunicación digital no se ha reflejado en avances en la digitalización de sus negocios. Un ejemplo es que la carencia financiera afecta este objetivo. Es pertinente decir que la digitalización es un procesos complejo, sino que se requiere de confianza con la relación interpersonal que no es sustituida al 100 por ciento por el mundo digital.
A través de Strive Mexico, Fundación Capital ayudará las micro y pequeñas empresas en su viaje digital al poner a su disposición herramientas, tutoría y apoyo entre pares para permitirles prosperar y convertirse en las protagonistas productivos y resilientes de la economía de México”.