Los avances en la Inteligencia Artificial (IA) hacen que sus aplicaciones se extiendan cada vez a más sectores y la economía es uno de ellos. En este sentido, la transformación que encabeza la IA tiene grandes implicaciones no sólo a nivel empresarial, sino en países enteros.
Las grandes aportaciones económicas de la Inteligencia Artificial se basan en su capacidad para analizar, sintetizar e interpretar datos, facilitando el desarrollo de propuestas de mejora y optimización de la labor de las empresas y, con ellas, el desarrollo de un país.
“Las soluciones que ofrece la IA ante una recesión económica son enormes porque abarcan todas las directrices y complejidades del problema. Quienes usen este tipo de tecnología a su favor, llámese empresas o gobiernos, tienen en sus manos la clave para transformar su situación financiera”, señala Gustavo Parés, director general de la empresa especializada en IA, NDS Cognitive Labs.
La Inteligencia Artificial se caracteriza por tener un impacto significativo en la reducción de costos, la optimización de las funciones financieras y la búsqueda de nuevas fuentes de ingresos, gracias a su capacidad de procesar en poco tiempo grandes cantidades de datos.
Para Microsoft, las aportaciones de la IA no sólo se basan en mejorar los entornos adversos como crisis, sino que también las previenen generando economías más sólidas. De acuerdo con esta empresa, las naciones que decidan apostar por una mayor adopción IA podrían incrementar su Producto Interno Bruto (PIB) hasta en un 4% anual.
En los beneficios de usar esta tecnología en una crisis son reducción de costos. Esto es lo primero en lo que piensan las empresas cuando atraviesan por situaciones financieras complicadas, pero si algo caracteriza a la Inteligencia Artificial es su posibilidad de reducir costos y realizar diversas tareas con alta precisión y en un corto tiempo.
Un ejemplo de esto son los chatbots, que responden a una gran cantidad de solicitudes por parte de clientes, sin restricciones de horarios y con una alta efectividad, su relación costo-beneficio para una empresa es mucho mayor, permitiendo a los trabajadores concentrarse en tareas más específicas.
La Inteligencia Artificial también contribuye a la disminución de costos, para el año 2025 aquellas empresas que utilicen algún tipo de tecnología basada en IA aumentarán su efectividad en más de un 25% .
Además, un reporte de Juniper Research señala que para el año 2023 se prevé que los chatbots de IA generen un ahorro de 5 mil millones de horas y 11 mil millones de dólares anuales, ya que incentivan la productividad y competitividad de las empresas.
La IA puede predecir el comportamiento de los consumidores con base en sus inquietudes, necesidades, poder adquisitivo, gustos, entre otros factores. Un mejor conocimiento del cliente lleva al desarrollo de mejores productos en menos tiempo y trae como resultado la optimización de procesos de fabricación y venta.
También puede analizar los factores sociales y culturales de una población para determinar qué tan factible es la venta de un producto y/o servicio en dicha zona, esto garantiza que el mercado al que ingresa una empresa cuenta con las condiciones idóneas para la venta de sus productos y con un mayor porcentaje de éxito en el mercado.