El estudio “Índice de Desarrollo Democrático de México 2022” –IDD-Méx-, de la Fundación Konrad Adenaur, Centro de Estudios Políticos y Sociales y el Instituto Nacional Electoral (INE), señala que el estado de Querétaro alcanzó una calificación de 5,633 puntos, un retrocede cinco lugares en el ranking nacional y se coloca en el  puesto 8 de los 32 estados, perdiendo además casi 500 puntos respecto de 2021, aunque mantiene su calificación de desarrollo democrático medio.

El desplome en el índice general se explica por los retrocesos observados en Democracia de la Ciudadanía y en Democracia de las Instituciones, que no se compensan con el desempeño de las restantes dos dimensiones.

Yucatán vuelve a liderar, por sexto año, el ranking del IDD-Mex, pero además lo hace superando sus valores del año anterior en tres de las cuatro dimensiones analizadas, es seguido por Sinaloa y Colima. Mientras que Chiapas, Guerrero y Morelos acompañan a Puebla en la porción inferior del ranking.

La Región Bajío muestra bastante homogeneidad con un estado con alto desarrollo, Colima; tres con desarrollo medio: Aguascalientes, Querétaro y Jalisco; Guanajuato presenta este año bajo desarrollo y Michoacán continúa en zona de mínimo desarrollo.

En el listado de oportunidades para mejorar el desarrollo democrático en Querétaro se subrayan los siguientes aspectos: Fortalecer el respeto de los derechos políticos; Facilitar el acceso de las mujeres a los puestos institucionales de decisión; Promover la democratización de los partidos políticos, especialmente en la selección de sus candidatos; Instrumentar políticas eficaces de control legal y político.

Así como sistematizar la atención de grupos sociales excluidos y lograr eficacia en la satisfacción de sus demandas, evitando acciones desestabilizadoras; Promover oportunidades reales de empleo, particularmente para grupos vulnerables; Incrementar y lograr eficacia en los recursos para la educación y la salud; Impulsar políticas de desarrollo para aumentar el PIB per cápita; Elevar la recaudación fiscal para disfrutar de mayor autonomía, y Promover políticas de inversión y de formación de capital fijo del estado.

Entre los diversos rubros analizados, se señala que Querétaro se situó, por séptima vez, en el conjunto de entidades con desarrollo democrático medio. En las demás mediciones formó parte del grupo con alto desarrollo, salvo en 2015.

En la Dimensión I, Democracia de la Ciudadanía, desciende 12 por ciento y se coloca en el 5° sitio del ranking nacional, por encima del promedio nacional. Mantiene un valor intermedio respecto de la serie.

En el apartado de Democracia de las Instituciones, Dimensión II, muestra una caída de 10 por ciento en comparación con el año anterior y con 4,112 puntos pasa a integrar el grupo de entidades con bajo desarrollo y retrocede tres lugares en la escala, por lo que ahora toma el puesto 11°, abandonando el lote de los 10 mejores estados de México.

En el epíteto de Accountability legal y política y Desestabilización, indicadores que exponen un comportamiento extremadamente deficitario y es en esas áreas donde se presentan los mayores retos para que el estado avance positivamente en la democracia.

La Dimensión III, Democracia Social, es el mayor punto de debilidad de la democracia queretana, el análisis realizado señala que la entidad concentra en esta dimensión buena parte de sus falencias, aunque se mantiene en el nivel del año pasado. Más de 700 puntos por debajo del promedio nacional y una estabilización en valores negativos dan cuenta de la necesidad de políticas que corrijan una situación que se expresa negativamente en varias áreas del desarrollo social.

En la Dimensión IV, Democracia Económica, Querétaro sube de nivel y califica con alto desarrollo al obtener 1,046 puntos por encima del promedio, pero por el avance de otras entidades se mantiene en el puesto 8 del ranking nacional. Sus oportunidades de cambio más importantes radican en los indicadores de PIB per cápita e Inversión.

En Democracia de la Ciudadanía, la entidad tiene la dimensión de mayor variación, con diferencias de más de 4,000 puntos entre sus extremos. En 2015 tocaba su valor más bajo, con menos de 3,500 puntos, en el grupo de bajo desarrollo; en cambio, en 2019 establecía su mejor registro con casi 8,000 puntos.

En Democracia de las Instituciones, Dimensión II, tuvo un comportamiento relativamente estable, con valores fluctuantes entre los 4,000 y los 5,000 puntos. Su punto más bajo de la serie llegó en 2015, toda vez que sufrió una caída por debajo de los 4,000 puntos.

En la Dimensión III, Democracia Social, muestra una tendencia que se estabilizó en valores negativos, por debajo del promedio nacional. Inició la serie en 2010 con más de 1,000 puntos por abajo de dicho promedio y aunque superó esa barrera a partir de 2012, siempre se mantuvo en puntuaciones negativas, dentro de la categoría de bajo desarrollo.

En la Dimensión IV, Democracia Económica, Querétaro siempre ha sumado valores positivos que rebasan el promedio nacional.

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