Por: Mikel Cearsolo, CEO Ludus Global
En los últimos meses hemos destacado a la tecnología como el motor del aprendizaje en una época totalmente digital.
Como profesionales en constante desarrollo, nuestro mundo tecnológico evoluciona todos los días y eso ha impulsado a directores, colaboradores, proveedores y hasta estudiantes, a romper paradigmas y adentrarse en nuevas formas de capacitación.
No es producto de la casualidad que empresas del sector automotriz sean de las primeras en hacer uso de la realidad virtual (RV) para visualizar nuevos diseños de interiores de los vehículos, así como otras características físicas.
A través de esta tecnología se pueden comprobar aspectos como la funcionalidad del tablero y controles, lo que permite tomar decisiones sin tener que invertir en costosos túneles de simulación empleados anteriormente para el prototipado. Hasta hace no muchos años era necesario construir, aunque con calidades inferiores, el modelo que posteriormente se comercializaría para analizar su uso real.
Este ejemplo nos comprueba que con la RV se pueden potenciar y crear experiencias más envolventes, no solo en el desarrollo de juegos, sino hasta en la asistencia sanitaria, el diseño de automóviles y la prevención de accidentes; hablamos de una tecnología que nos permite superar los límites y al mismo tiempo, trabajar codo a codo con los marcos existentes.
Estas son algunas de las nuevas oportunidades que la realidad virtual ofrece al sector industrial; sin embargo, me gustaría profundizar concretamente sobre cómo esta tecnología impacta en la actividad empresarial y organizacional.
Imaginemos que somos los directores generales de una empresa perteneciente al ramo de la construcción. Un sector en plena transformación con el uso generalizado de soluciones de realidad virtual. La adopción de estas tecnologías nos ofrecerían numerosas ventajas, especialmente, las relacionadas con la precisión y la seguridad.
Esto puede ahorrar tiempo, dinero y frustraciones durante los proyectos. Además, el personal no tendrá que ponerse en peligro para comprobar si alguna parte de su construcción cumple las normas exigidas; en su lugar, estas tareas pueden realizarse a distancia desde una oficina o lugar de trabajo sin comprometer la precisión ni la seguridad.
El uso coherente de las tecnologías de RV permite al sector de la construcción avanzar en esta nueva era digital, generando mejores resultados para todos los implicados.
Capacitadores
Nuestra experiencia de 11 años nos ha permitido comprobar que el entrenamiento de realidad virtual impulsa casi en un 76% la eficacia del aprendizaje en comparación con los métodos tradicionales.
Hemos descubierto que cuando se practican las habilidades blandas como la comunicación, planificación, organización o flexibilidad, por mencionar algunas, las simulaciones de realidad virtual enseñan a los alumnos más rápido creando un vínculo emocional más fuerte con el contenido.
Lo que nos lleva a la siguiente conclusión: los adultos aprenden mejor y retienen más información en condiciones que se aproximan al rendimiento del mundo real. Aquí podemos destacar nuestra metodología Learn by living, la cual incorpora la capacidad de cometer errores y aprender de las consecuencias, siendo clave para implementar en la industria de prevención de riesgos laborales.
Entrenamiento y formación de operarios
La realidad virtual aplicada a la prevención en riesgos laborales tienen un ‘match’ perfecto porque permiten recrear situaciones que en la realidad serían peligrosas, costosas o logísticamente complejas, eliminando el riesgo.
En este sentido, el entrenamiento es muy efectivo cuando la persona lo recibe y lo absorbe, es decir, no se trata nada más de estar presente y pasar una evaluación. Varias son las veces que no hemos sabido o dado la importancia necesaria a las medidas de prevención hasta que nos sucede algo.
Una consecuencia positiva que observamos a través de los entrenamientos con el uso de la plataforma de Ludus es que a los colaboradores les está importando más, no solo el entrenamiento en sí, sino los procesos.
Más allá de aprender con la práctica, el colaborador aprende mediante la experiencia. Como por ejemplo, en la formación de técnicos especializados en la manipulación de maquinaria industrial podemos generar entornos para visualizar las máquinas funcionando de manera real, permitiendo a los usuarios interactuar con ellas para la resolución de averías o incidencias.
A través del uso de las gafas de realidad virtual es posible colocar a un operario en un entorno virtual donde se visualice una máquina que ha detenido su producción para que este compruebe su funcionamiento y solucione la incidencia tal y como si se la encontrara en el entorno real de fábrica.
En resumen, la realidad virtual se sitúa cercana al ámbito del training ofreciendo a las empresas industriales una herramienta mucho óptima y económica para la formación de sus trabajadores.