En México, los meses de cuarentena y de “nueva normalidad” traen consigo diversos problemas sociales, pues la convivencia de muchas horas entre las personas, la falta de valores culturales, problemas económicos han derivado en violencia de género.
La Secretaría de Gobernación (Segob) informó que las llamadas de emergencia al 911 por parte de mujeres víctimas de violencia aumentaron a tasa anual 42.32 por ciento de enero a septiembre de 2020, al pasar de una cifra de 140 mil 503 a 199 mil 974.
Al respecto, el presidente del Consejo Ciudadano de seguridad y Justicia de la Ciudad de México (CDMX), Salvador Guerrero Chipres, confirmó a periódico AM de Querétaro que la capital del país, en sus cinturones de pobreza, tres de cada 10 hogares padece hacinamiento y esto es uno de los varios factores que detona en violencia de género.
Abundó que el hacinamiento no es la situación única que provoca violencia de género, sino que es un factor más; existen zonas en la CDMX como otras urbes de México que padecen de problemas similares. “Con frecuencia la violencia surge en familias que padecen de pobreza económica, malas relaciones personales y poco cultura educativa. Debemos establecer relaciones sanas para evitar esta violencia, agregó, requerimos fomentar la cultura cívica para evitar que este conflicto urbano sea un detonador de violencia”.
Las palabras del funcionario capitalino, son expresadas en el marco del aumento de contagios de COVID-19 en entidades como Chihuahua, Coahuila y Durango, que analizan el implementar nuevas campañas de “Quédate en Casa”, que invita a que la gente se quede en sus hogares por muchas horas.
Cabe recordar que la Encuesta Nacional de Hogares (ENH) del INEGI estima que en el país hay 34.1 millones de hogares, donde habitan 123.6 millones de personas.
El estudio señala que el porcentaje de integrantes del hogar que viven en condiciones de hacinamiento disminuyó de 12% a 9.4% entre 2014 y 2017, esta cifra revela que todavía millones de mexicanos habitan de manera precaria viviendas en las que muchas personas tienen que ocupar juntas espacios muy pequeños. En nuestro país, los estados con mayor hacinamiento son Guerrero, Chiapas y Quintana Roo.
Por su parte, ONU-Hábitat estima que por lo menos el 38.4 % de la población mexicana habita una vivienda no adecuada. Esto significa que casi cuatro de cada 10 personas viven en condiciones de hacinamiento y con diversos problemas sociales.
“El hacinamiento, la inseguridad en la tenencia, la contaminación auditiva, la violencia social y la inseguridad tienen efectos negativos en la salud mental. El derecho a una vivienda adecuada es un derecho humano reconocido en la normativa internacional”, señala Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Por su parte, el encargado de los temas de salud y vocero de la campaña de “Quédate en Casa”, el subsecretario de Prevención de la Salud, Hugo López-Gatell, declaró a AM de Querétaro que a nivel federal, las labores de coordinación entre aspectos sanitarios y de violencia de género, “son analizados por la doctora Karla Berdichevsky Feldman, directora general del Centro Nacional de Equidad y Género y Salud Reproductiva, quien es muy conocedora de este tema y labora de forma cercana con la Comisión Nacional para Evitar y Erradicar la Violencia en Mujeres (Conavim); y el Instituto Nacional de las Mujeres”, organismos encargados de atender a personas violentadas.