A México le urge construir ya un Sistema Nacional de Cuidados público, universal, de calidad e incluyente, que permita la incorporación de las mujeres al trabajo remunerado, a la vez de que garantice el derecho al cuidado de las personas que a lo largo de su vida lo requieran, especialmente niños y niñas en su primera infancia.
Para este sistema se requiere inversión progresiva, principalmente pública, que puede traer múltiples beneficios al facilitar el desarrollo de las personas cuidadoras, contribuir a erradicar la pobreza en millones de hogares, por el incremento del ingreso generado por mujeres que se sumen al trabajo remunerado e impulsar el crecimiento económico, con el consiguiente efecto en las finanzas públicas.
Así lo expusieron expertas en la materia durante la mesa de diálogo Frente a la exclusión de las mujeres, urge Sistema Nacional de Cuidados, organizada por Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.
Paulina Gutiérrez, responsable de Innovación y Articulación de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, apuntó que en México hay 21.5 millones de mujeres excluidas del trabajo, de las cuales 17 millones no pueden salir a buscar trabajo porque están realizando labores de cuidado y domésticas, sin remuneración.
Si estas actividades se contabilizan en la economía formal, tendrían un valor de 6.8 billones de pesos, lo que representa 26.6 por ciento del PIB nacional, indica el INEGI.
Sin embargo, en México estas labores que realizan principalmente mujeres (el 93 por ciento) no están remuneradas. De tal forma, construir un Sistema de Cuidados permitiría la participación laboral de millones de mujeres; además, la inversión que realizaría el sector público tendría un efecto importante en la reactivación económica y reforzaría la contribución tributaria por el crecimiento económico.
Thania de la Garza, coordinadora de Gestión Institucional Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), refirió que el Sistema Nacional de Cuidados significaría un motor relevante para la movilidad social.
“Las personas cuidadoras limitan sus oportunidades por la sobrecarga de trabajo y también porque precarizan el trabajo tanto doméstico como el de cuidados; si no empezamos con la construcción de un Sistema de Cuidados, que implica la inversión de recursos públicos, estamos generando más costos ahorita que el no hacer nada”, subrayó.
Estefanie Hechenberger, gerente del Programa Bienestar y Trabajo de Oxfam México, destacó que ya hay acercamientos y esfuerzos, incluso legislativos, para concretar el sistema. Consideró que hay una voluntad política en los estados para avanzar en la construcción de sistemas a nivel local y área de oportunidad para construir consensos en torno a los cuidados, labor que le corresponde al gobierno y que puede hacerse a través de un diálogo amplio con la sociedad civil y con la iniciativa privada.