Los cuatro grandes retos en sector agua en México son la seguridad hídrica, derecho humano de acceso al agua, invertir en infraestructura del agua (40% promedio nacional), y cultura de cuidado del agua, indica el Consejo Consultivo del Agua. En la actualidad se estima que 35 millones de mexicanos no cuentan con acceso constante al agua y poder tener una calidad de vida decorosa.

Raúl Rodríguez, presidente del Consejo Consultivo del Agua, mencionó que debe reconocerse el problema de estrés hídrico que se avecina con fuerza en el país y un ejemplo fue Nuevo León que llegó al Día Cero del agua en 2022. De las 210 presas del país, 60 de ellas están a menos del 50 por ciento de su capacidad.

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) subraya que se espera un 24 por ciento menos de lluvias en 2023 y esto pone en focos rojos a cerca de 14 entidades -entre ellos Querétaro- para tener un mejor uso sustentable del agua. Por ello, se requiere participación de todos los sectores sociales para atender este tema.

Acotó que se debe reglamentar la ley del Agua y no es necesario abrigar una ley marco del sector. “México debe sumarse a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y optar por buenas prácticas a favor de este rubro y tener mejor cultura del agua. Aunado a establecer diversas campañas mediáticas para sensibilizar a la gente sobre la conservación del agua».

Alejandra Isela Martínez, subdirectora del Agua de la Conagua, dijo que sólo un 58 por ciento de la población tiene acceso diario al agua y un 40 por ciento del agua se pierde en fugas y mala distribución del líquido.

La Conagua en este sexenio se enfoca en cinco ejes de trabajo: derecho humano al agua, gestión integral del agua, garantizar la seguridad hídrica, mejorar los servicios de agua potable, y transparencia.

El agua es un problema de todos y nadie puede quedar ajena al tema y se requiere tener diálogo con otras naciones y aprender de los buenos ejemplos. Un caso es el gasto excesivo de agua en el sector agrícola, que consume el 70 por ciento del líquido nacional. “Existen diversas alternativas que son llevar agua del río Panuco al norte del país, un trabajo regional para atender este problema hídrico, tecnificar el campo, desalinizar agua de mar, etc., son un sinfín de soluciones, acotó.

Además de poner al día a las 3, 960 plantas de tratamiento del país, pues 2,530 no funcionan por falta de presupuesto federal y estatal, se debe trabajar en una ley general del agua y defina la rectora del Estado en materia del agua, así como definir que es derecho humano al agua, de los 2,471 municipios y sus comisiones del agua sólo 20 organismos locales funcionan en números negros y un 97 por ciento de los mismos están quebrados, crear un incentivo al reuso de agua tratada, declaró el diputado federal Rubén Muñoz.

La resiliencia hídrica debe ser el nuevo paradigma a establecer, pues no se atiende a los mayores demandantes del líquido, pues cuando surge el problema se voltea a ver a los industriales sin mirar al sector agrícola.

Igualmente, explicó que el país requiere de 40 mil millones de pesos por los siguientes 8 años para tecnificar el campo y garantizar los alimentos de los mexicanos.

La coordinadora del programa de Seguridad Hídrica del Banco Mundial, Verónica Martínez, indicó que se debe enfrentar el tema de agua desde el Cambio Climático y establecer un sistema financiero del agua para ordenar proyectos, pues la Conagua no ha priorizado proyectos de forma adecuada y estructurada, deben ser analizarse con visión de cuenca y se abarque mayor impacto. No sólo debe pensarse en proyectos federales sino en financiamiento de todos los sectores.

Lamentó que las leyes mexicanas fracasan por la debilidad institucional de los organismos públicos y que afectan a todos los rubros relacionados con el derecho humano al agua. Aunado a que diversos esquemas de trabajo con el gobierno federal y el Banco Mundial en este sexenio se paralizaron.

En México, el subsidio al agua equivale a un 80 por ciento de su precio real; es decir, los mexicanos sólo pagan un 20 por ciento del costo real. Además que el 75 por ciento del agua de riego en el país se dota de forma gratuita. Mientras que los cargos más altos se enfocan en el sector industrial, dijo que el sistema fiscal del agua es un barril sin fondo. Por ello, se debe hacer una reforma fiscal federal y local del agua para subir el costo del agua y los sectores con capacidad económica alta paguen el costo real del líquido.

Las tres iniciativas de ley del Agua que se tienen en el Congreso tienen muchas debilidades y el Congreso federal trabajará con ellas. Existen dos ausentes en dicho reglamento como es la Conagua que no tiene una participación en dichas iniciativas y las empresas tampoco tiene opinión. En caso de sacar dichas iniciativas provocará que el gran perdedor será la sociedad mexicana. Un punto es la debilidad en el retiro de confecciones con el invento de entes no legales para quitar concesiones.

El sistema privado requiere asistir y opinar sobre los reglamentos que se están planteando, pero el tenor fundado requiere el no alzar la voz, pues se dañara la productividad.

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