En el marco del Día Mundial del Agua la organización TECHO hace un llamado para atender a las familias que viven en situación de vulnerabilidad y que carecen del acceso a agua potable continua y segura. En este contexto la organización dio a conocer la Encuesta de Caracterización de Hogares 2022 que realizó en los asentamientos donde tiene presencia, tan sólo el 32.6% de las viviendas de familias se encuentran conectadas a una tubería de red de agua potable, mientras que el 40.7% de las familias no cuenta con un acceso directo al agua y la obtiene de fuentes naturales, agua de lluvia, de pozos conectados a mangueras o pozos comunitarios.
En la misma encuesta se menciona que 6 de cada 10 viviendas acceden al agua a través del acarreo, al no contar con la infraestructura necesaria para su accesibilidad. De estás familias que acarrean el agua a sus viviendas 3 de cada 10 invierten entre 30 minutos o más de 60 minutos en acercarla a sus viviendas.
La tarea de acarrear agua y proveerla a la familia la puede realizar un hombre o una mujer integrante del núcleo familiar. Sin embargo, en 6 de cada 10 familias la tarea de acarreo la lleva a cabo una mujer.
Cada familia utiliza distintos tipos de contenedores para almacenar el agua, donde el más popular es el tinaco, aunque solo en el 30.9% de las familias lo tiene. El contenedor más utilizado por las familias del asentamiento popular es el tambo (53.2%), que por lo general lo ubican afuera de la vivienda y no se encuentra conectado a ningún tipo de conexión que facilite la llegada de agua.
Anualmente se conmemora el Día Mundial del Agua como un medio para centrar la atención en la crisis mundial del agua, en apoyo del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 6: agua y saneamiento para todos para 2030. Sin embargo, la realidad nos muestra que las familias que habitan en asentamientos populares carecen de este vital líquido.
Los servicios básicos de que dispone una vivienda son tan importantes como los materiales de los que está construida. La disponibilidad de servicios básicos afecta las condiciones sanitarias y las actividades que los residentes de la vivienda pueden desarrollar, se considera que una persona presenta la carencia por acceso a servicios básicos si reside en una vivienda con al menos una de las siguientes características: el agua se obtiene de un pozo, río, lago, arroyo, pipa; o bien, el agua entubada se adquiere por acarreo de otra vivienda, o de la llave pública, hidrante o no cuentan con servicio de drenaje y el desagüe tiene conexión a una tubería que va a dar a un río, lago, mar, barranca o grieta.
La vulneración del derecho al agua es una constante en nuestro país, que se acrecienta entre la población en situación de pobreza y se agrava aún más en los asentamientos populares, pues si bien es una obligación de los gobiernos brindar el acceso al agua, TECHO hace el llamado a trabajar en conjunto entre la autoridad y la población para hacer la diferencia para estas familias que no tienen acceso al vital líquido.