Luis Hernández, director general de la empresa Battery Depot, indicó que los segmentos de mayor crecimiento de mercado del 52 por ciento, son las baterías de litio para almacenar energía (de origen chino) y las empresas puedan bajar sus consumos de energía. Igualmente, los kids de transformación de los vehículos para ser eléctricos, con un alza del 200 por ciento.
Detalló que tienen su mayor incidencia como es Baja California Sur, por su problema de falta de energía y requiere de almacenar electricidad, así como la península de Yucatán, también el estado de Jalisco, Nuevo León, Querétaro, Oaxaca y el Valle de México.
En el caso del bajío, los equipos de almacenamiento de energía se enfoca en las industrias de alto consumo y que busca no verse afectados por los vaivenes de la red eléctrica pública que afecta su productividad y debido a la vocación industrial del bajío se busca evitar dicha situación.
Los vehículos convertidos a eléctricos están más concentrados en los estados de Nuevo León, Guanajuato, Ciudad de México y Jalisco, con automóviles y hasta mototaxis.
Los costos en promedio del kid eléctrico oscila entre 10 mil dólares (menos de una tonelada), que se hace en común en autos antiguos no en automóviles modernos. Dichos automotores con alcance medio y que son de uso más familiar.
Recordó que firmarán convenio con el Tecnológico de Monterrey para el desarrollo de tecnología propia, pues al momento siguen con atrasos para equipararse con los materiales importados. “El mercado nacional en almacenamiento de energía tiene un atraso de unos 10 años a diferencia de Europa y se necesita mayor impulso; debido al desconocimiento y falta de inversión”.
Esta empresa ofrece diversas tecnologías para el almacenamiento de energía y para vehículos eléctricos se auxilia a que los autos de combustión se pueda transformar a uno eléctrico.
Abundó que trabajan en traer productos nuevos al mercado mexicano como son la Comisión Federal de Electricidad (CFE), así como un hotel en Yucatán que apuesta a la energía solar, pues no tiene acceso a la red eléctrica tradicional. Solo son proveedores de los equipos, aclaró que ellos no se encargan de la transformación de los vehículos.
Destacó el caso de la micro red instalada en la reserva de Sian Kaan, Quintana Roo, con uso de baterías de litio para generar energía renovable, pues al ser una zona protegida la CFE no puede instalar postes y cableado.
Abundó que el retorno de inversión de equipos de almacenamiento (para proyectos de consumo de unos 20 mil pesos al bimestre) tiene un retorno de 5 a 6 años, pues en la actualidad este tipo de proyectos no tienen una visión de atender a hogares.