En un hito de colaboración entre las autoridades gubernamentales, el sector científico, las comunidades locales y el Fondo Internacional para el Bienestar Animal (IFAW), se ha liberado con éxito a un jaguar joven dentro de su hábitat natural después de resultar gravemente herido debido a la colisión contra un vehículo cerca de Chetumal, México, el 11 de junio.
El jaguar macho herido fue trasladado al Zoológico de Payo Obispo para comenzar el proceso de rehabilitación donde fue vigilado y cuidado por un extenso equipo multidisciplinario quienes le dieron después el nombre de ‘Covi’. Al examinarlo, se descubrió que Covi, que se estima que tiene aproximadamente 18 meses de edad, había sufrido una fractura en el omóplato izquierdo y laceraciones adicionales en su cuerpo, aunque su prognosis seguía siendo buena. La habilidad del equipo para monitorear y cuidar a Covi fue crítica para su recuperación (luego de la curación de la fractura), incluso con mínima interacción humana. Esto fue posible gracias a una red de cámaras y el uso de recintos espaciosos para promover un comportamiento más natural. Se organizó un grupo asesor para monitorear el proceso de rehabilitación. Este grupo estaba compuesto por miembros del Zoológico Payo Obispo, la Alianza Nacional para la Conservación del Jaguar (ANCJ), la Procuraduría Federal de Protección del Ambiente (PROFEPA), la Procuraduría de Protección del Ambiente del Estado de Quintana Roo (PPA), el Instituto de Biodiversidad y Áreas Naturales Protegidas del Estado de Quintana Roo (IBANQROO), y el IFAW.
El grupo determinó que el jaguar podría efectivamente ser liberado de nuevo en la naturaleza una vez que empezara a mostrar signos de una recuperación completa, incluyendo excelentes habilidades de caza. En conjunto con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), se decidió que la Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an proporcionaba el lugar de liberación más adecuado dada su abundante presa, el acceso al agua, el bajo riesgo de conflicto humano y el apoyo general de la comunidad local del Ejido X-hazil.
En la madrugada del 22 de septiembre, el equipo médico, que incluía a la Dra. Erika Flores, Coordinadora de Respuesta a Emergencias y Rescate de Animales del IFAW para América Latina, preparó a Covi para el viaje de 85 millas hasta la Reserva de Sian Ka’an. Un pequeño equipo estuvo en el lugar para filmar el evento. Se condujeron pruebas médicas y se anestesió al joven macho con un dardo para colocarle un collar satelital para rastrear sus movimientos después de la liberación. Luego se le ubicó dentro de una caja de madera preparada para su transporte en el vehículo de rescate de animales del IFAW, que era escoltado a su vez por otros vehículos que representaban a todas las autoridades involucradas en el rescate.
Al llegar a las afueras del área de liberación, el equipo trasladó al jaguar a una camioneta todoterreno para continuar el viaje de casi 10 millas por caminos destapados hasta la entrada de la reserva. Tomando turnos en grupos de seis, el equipo se puso en marcha a pie para cargar la caja otras 400 yardas más adentro en la selva hasta el sitio de liberación, donde se instaló un sistema de liberación con poleas y cuerdas para garantizar que la liberación sucediera a una distancia segura. El biólogo, y líder del equipo,
Roger Braga, Director del Zoológico de Payo Obispo, tiró de la cuerda que señalaba la liberación del animal. Lentamente, Covi emergió y con calma comenzó a caminar hacia la selva y desapareció en su interior.
De acuerdo con Joaquín de la Torre, Director Regional del IFAW para América Latina y el Caribe, «En la región, este es el primer caso exitoso de rescate, rehabilitación y liberación en la naturaleza de un jaguar herido. Es muy poco común que la vida silvestre se recupere completamente después de sufrir un golpe de vehículo. En los raros casos en que lo hacen, a menudo están destinados a vivir en cautiverio por el resto de sus vidas. En general, las poblaciones de jaguares están en declive y, actualmente y bajo la legislación actual de México, están designadas como ‘en riesgo de extinción’. Cada jaguar es importante. Estamos firmemente convencidos de que la vida silvestre debe permanecer en la naturaleza para prosperar, y estamos encantados de que todas las partes se hayan unido para hacer esto una realidad.»
«La liberación de este jaguar fue un hito de la colaboración coordinada entre las autoridades federales, estatales y municipales, junto con una comunidad local comprometida y las ONGs como el IFAW,» comentó Flores. «Como equipo, todos entendemos el valor de la conservación de este joven jaguar porque sabemos que los animales individuales importan. Estamos encantados de haber jugado un papel en su exitosa reintroducción en la naturaleza, donde ahora es capaz de prosperar una vez más».
Se estima que la población de jaguares en México es de unos 4.000 ejemplares. Covi fue descubierto en el Estado de Quintana Roo, donde se cree que actualmente reside alrededor del 20% de la población total. Según el ANCJ, la población de jaguares en la Península de Yucatán es la mayor y la más saludable dada la abundancia de presas y otras condiciones biológicas. El jaguar, que es el gato salvaje más grande de las Américas, se enfrenta a graves amenazas como resultado de la pérdida y la fragmentación de su hábitat, las colisiones con vehículos, los conflictos debido a la proximidad con los seres humanos y los animales domésticos, así como la persistente amenaza del comercio de vida silvestre ilegal.