De acuerdo con los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), en México, durante 2022, hubieron 93.1 millones de personas usuarias de internet. Lo cual quiere decir que existen millones de dispositivos como PCs, laptops, tablets, celulares, entre otros, que diariamente están conectados a internet, que al paso del tiempo se vuvlen desechos, que sólo un 20 por ciento son reciclados de buena manera.
A medida que se depende cada vez más de la tecnología, los residuos electrónicos se convierten en un problema más prevalente. Desde la creciente cantidad de residuos electrónicos hasta los programas de devolución de productos que existen, se debe informar a la población sobre la manera adecuada de desechar sus insumos electrónicos como son los discos duros.
Los residuos electrónicos son cualquier dispositivo que ha sido desechado por su último usuario. Estos pueden ser artículos que ya no se desean, que no funcionan o que han llegado al final de su vida útil. Estos incluyen, computadoras, televisores, laptops, teléfonos celulares y discos duros, entre otros.
Los residuos electrónicos son el flujo de desechos de mayor crecimiento a nivel mundial y, en 2021, la cantidad generada casi superó el peso de la Gran Muralla China. Los residuos electrónicos pueden también contener sustancias tóxicas peligrosas como plomo, mercurio, cadmio y berilio. Además, muchos electrónicos están diseñados con componentes que contienen metales preciosos como oro, plata y paladio que pueden recuperarse una vez que se reciclan apropiadamente
La respuesta es desecharlos adecuadamente. Sin embargo, el reciclaje de electrónicos es complejo y estos no debe hacerse mediante el sistema de recolección de basura residencial.
Lo ideal es buscar en su localidad organizaciones especializadas en este tipo de residuos para que estos sean aprovechados de la mejor manera. El proceso de reciclaje consiste en desmontarlo o separar todas sus piezas y clasificar los materiales que incluye.
Para mayor seguridad, se recomienda respaldar y borrar la unidad antes de reciclarla. Los métodos para borrar la unidad de manera segura incluyen sobrescribir los datos o utilizar un software de destrucción de datos.
El reciclaje de dispositivos electrónicos, como los discos duros, permite recuperar elementos que regresan al ciclo de producción, disminuyendo así la extracción de materias primas.