Así como en esta temporada de heladas debemos de estar al pendiente de nuestra salud, para evitar enfermedades respiratorias, también esta época afecta nuestro hogar, ya que existen algunos daños que se presentan de manera silenciosa y podrían ocasionar la falta de agua potable por la ruptura de las tuberías, ocasionadas por las bajas temperaturas.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, se han registrado el frente frío número 35 como parte de la temporada invernal que han provocado un descenso en la temperatura de entre 0 a -10 grados centígrados, trayendo consigo un ambiente gélido, heladas e incluso nieve para algunos estados de la República, como Durango, Chihuahua, Sonora, Zacatecas, San Luis Potosí y regiones aledañas.
Al congelarse, el agua se expande y trae consigo la necesidad de más espacio dentro de las tuberías hidráulicas, sin embargo, la mayoría de ellas son fabricadas a base de materiales que no permite la flexibilidad al momento de exponerlas a cambios bruscos de temperatura.
El mayor problema llega en el momento en que comienza el colapso con la ruptura de las tuberías y la falta del suministro de agua, al no permitir que ésta fluya con normalidad.
Los expertos en conducción hidráulica de Rotoplas, señala que el principal riesgo también se presenta cuando las tuberías de agua caliente, que suministran los boilers o calentadores, se congela aumentando las posibilidades de una explosión.
“En regiones donde las temperaturas son muy extremas, se recomienda adquirir aditamentos especiales como recubrimientos o aislantes para las tuberías, pero la realidad es que al momento de iniciar el deshielo es posible ver las grietas y, en consecuencia, comienzan a presentarse fugas de agua que en ocasiones no se perciben a simple vista, pero que a la larga presenta daños como filtraciones o humedad en los muros”, destacó.
Por esa razón, enfatizó en la revisión periódica del sistema hidráulico e identificar cualquier signo de fuga para realizar el cambio de tubería o iniciar su reparación. También se recomienda usar materiales flexibles que resistan la presión o el incremento del volumen por congelamiento del agua como lo es el PPR, que además de ser eficientes y resistentes a temperaturas extremas, son mucho más costeables.
Por último, los expertos comentan que no es necesario contemplar gastos extras si se considera instalaciones hidráulicas óptimas desde el inicio de la construcción, que cuenten con el respaldo de marcas reconocidas y garantías por varios años de vida útil, por ejemplo, Tuboplus con 25 años. De esta manera tener que esperar el deshielo para que el agua pueda seguir circulando en el hogar, serían cosa del pasado.