La ropa de segunda mano ha tenido un auge en México. Las tiendas que comercializan este tipo de productos han alzado la bandera para generar hábitos de consumo conscientes sobre la sostenibilidad. Prácticamente se ha convertido en un movimiento que ofrece beneficios económicos y ambientales, y son generaciones como los Millennials y la Gen Z quienes han puesto en alto este tipo de consumo.
Durante 2023, los Millennials se convirtieron en quienes más ropa de segunda mano consumían, con un 33 por ciento, seguido por la Gen Z, con 26%. De acuerdo con Ollero, para este 2024 el consumo de estas prendas aumentó a 38 por ciento (Millennials) y 30 por ciento (Gen Z).
De acuerdo con la plataforma de comercio de ropa de segunda mano GoTrendier, este segmento ha crecido en popularidad por su enfoque en la sostenibilidad y el ahorro económico. En su informe De Primera Mano sobre la Segunda Mano, se estima que el mercado mundial de ropa de segunda mano casi se duplicará en 2027, alcanzando los 350 millones de dólares.
Cecilia Ollero, Country Manager de GoTrendier en México, indica que el consumo de ropa de segunda mano tiene diversas ventajas sobre el fast fashion, como es la sostenibilidad, pues esta tendencia ayuda a reducir el impacto ambiental al evitar que millones de toneladas de desechos textiles terminen en los vertederos.
“Se estima que cada prenda de segunda mano comprada ahorra aproximadamente 27 litros de agua, una cifra significativa considerando la cantidad de agua que se necesita para producir una nueva prenda”, (de acuerdo con la ONU, se requieren 7 mil 500 litros de agua para producir solamente unos jeans).
“Esta tendencia se basa en un aumento en la concienciación sobre sostenibilidad y acceso, facilitando a plataformas digitales que permiten la compra de ropa de segunda mano”, explica la especialista.
De igual forma, detalla que el panorama luce aún mejor para este sector, ya que para los próximos cinco años se proyecta que este mercado en México se duplique, alcanzando más de 600 mil nuevos usuarios al año. “Las plataformas digitales jugarán un papel fundamental en este crecimiento, facilitando la conexión entre vendedores y compradores”,.
La plataforma destaca que, solamente en 2023, a través de la compra de prendas usadas en aplicaciones digitales se logró un ahorro de 486 millones de litros de agua, 8 mil 540 toneladas de CO2 y 615 mil kilos de residuos anuales de mil 538 personas.
También se tiene un ahorro económico, ya que, el comprar ropa de segunda mano permite a los consumidores ahorrar entre un 50 y 80 por ciento en comparación con el precio de ropa nueva, permitiendo una mayor variedad en el armario sin comprometer el presupuesto”, apunta
Ollero indica que este tipo de prendas ofrece a los compradores una gran diversidad de estilos, desde vintage hasta contemporáneo, lo que permite a los consumidores expresar su individualidad.
Finalmente, la country manager de GoTrendier indica que las prendas que más consumen los mexicanos se pueden dividir en tres áreas:
Ropa vintage: chaquetas, jeans de tiro alto y camisetas gráficas de los años 80 y 90.
Accesorios: bolsos y joyería vintage.
Ropa de marca: zapatillas y prendas de marcas reconocidas, pero a precios accesibles.