Pese a los avances en la digitalización en los últimos años, la inclusión financiera sigue siendo un reto, sobre todo para muchas comunidades que están alejadas de las grandes urbes, especialmente en áreas rurales y remotas. Sin embargo, la tecnología está transformando este panorama, proporcionando soluciones que permiten a estas poblaciones acceder a servicios financieros básicos.
En un país tan grande como México se identifican muchas pequeñas ciudades que no están atendidas por la banca tradicional, donde sus habitantes están excluidos del sistema bancario. Es ahí donde las fintech están llegando a cambiar esa realidad. En Guerrero, Zacatecas, Oaxaca y Chiapas se encuentran las ciudades más rezagadas.
Hasta septiembre de 2024, la plataforma de microcréditos online, Credmex, identificó que ya ha otorgado créditos a personas que antes no tenían acceso a este tipo de productos financieros. Chiapas ya representa el 1.9% de las solicitudes totales de préstamos personales en su plataforma, mientras que Oaxaca, el 1.8%, Guerrero, el 1%, y Zacatecas, el 0.6%.
En Chiapas los municipios que más buscan acceder a créditos online son Tuxtla Gutiérrez, Tapachula de Córdova y Ordóñez y San Cristóbal de las Casas. En Oaxaca la demanda se concentra en Oaxaca de Juárez, San Juan Bautista Tuxtepec y Salina Cruz. En Guerrero en Acapulco de Juárez y Chilpancingo, mientras que en Zacatecas se identifican más solicitudes en Guadalupe, la capital y Fresnillo.
De acuerdo con Statista, en 2023, las fintech representaron el 15% del mercado de préstamos en México, y se espera que esta participación aumente en los próximos años.
En el país existen 1,142 municipios con un índice muy bajo de sucursales bancarias. Por ejemplo, en Chiapas solo hay 0.64 sucursales bancarias por cada 10,000 habitantes, según el índice citado.
Esto está muy ligado con la pobreza, pues los 1,142 municipios clasificados con un nivel muy bajo de inclusión financiera solo representaron el 4.1% del PIB.
En 2020, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), los municipios con mayor porcentaje de población en situación de pobreza se identifican principalmente en las regiones Pacífico Sur, Golfo de México, Península de Yucatán y Noroeste.
La entidad con mayor número de municipios en los que el 80% o más de su población estaba en situación de pobreza fue Oaxaca, ahí se concentraron 311 de los 629 municipios del país con esta característica. El resto son parte de 18 entidades entre las que se distinguen Puebla, Chiapas, Veracruz, Yucatán y Guerrero, porque en conjunto concentraron el 44.8% de estos municipios.
Credmex ha otorgado (a septiembre de 2024) 5.8% de sus microcréditos a personas que viven en Veracruz; 3.6% a habitantes de Puebla y 2.1% a habitantes de Yucatán.
“El 70% de los usuarios de plataformas de créditos online tienen ingresos bajos o moderados, por lo que plataformas como Credmex busca impulsar procesos sencillos y rápidos, para facilitar el acceso a quienes pueden tener limitaciones tecnológicas o de tiempo”, explica Miguel Carreón, director de Marketing para Credmex.
Las plataformas de microcréditos digitales buscan llegar a comunidades más alejadas a través de la tecnología, como las redes sociales, que permiten dar a conocer los procesos de solicitud de un crédito online, sin necesidad de acudir a alguna sucursal física.
“En poblaciones pequeñas los bancos tradicionales no están abriendo ni sucursales ni cajeros. Esto ocurre porque en el negocio de la banca tradicional a veces puede ser igualmente costoso originar un crédito de 3 mil pesos que uno de 2 millones de pesos, por eso la banca prefiere enfocarse en grandes clientes”, dice Carreón.
Debido a esto, la llegada de la inclusión financiera se dificulta para aquellos municipios con menos de 10,000 habitantes, como el municipio menos poblado de México, Santa Magdalena Jicotlán, en Oaxaca, que sólo cuenta con 81 personas, y donde los productos financieros más cercanos los ofrecen las Fintech.
Credmex destaca que para impulsar la inclusión financiera en pequeñas comunidades es necesario fortalecer la conectividad en zonas descentralizadas y remotas. Esto ayudará al desarrollo de la oferta que beneficie a un mayor número de mexicanos a través de plataformas financieras.